Una terraza fantástica, arropada por la mirada cercana de las montañas que guardan Cuenca.
Buena comida, buen servicio y un paisaje inmejorable para acompañar la deliciosa comida.
Recomendable 100% �
Excelente es poco, un lugar único, con una cocina fantastica, y un ambiente inigualable
Deberia ser un lugar de peregrinacion para cualquier turista, respiras tranquilidad y tienes unas vistas sublimes. OBLIGATORIO DE VISITAR!
Excelente relacion calidad-precio por el lugar, comida y atencion. Muy recomendadas las migas, el codillo y la torrija. Entorno tranquilo y bonitas vistas, con un trato muy agradable del personal. Volveremos!
Una terraza espectacular cerca de las casas colgantes pero resguardada del bullicio de la plaza de la Catedral. Corre un aire fresco buenísimo en la tarde y noches de verano.
Sirven platos típicos de la zona y especialidades de la casa. La atención en las mesas muy rápida. Hay sólo 8 mesas, separadas, y nos hemos sentido muy agusto y seguros. Muchas gracias.
Estuvimos el fin de semana pasado comiendo con otra familia. Es un rincón de paz, al lado de la Plaza Mayor lleno de turistas y terrazas de restaurantes atestados de gente.
Bajando de la catedral, justo al final de la Plaza Mayor a mano izquierda había unas escaleritas, bajamos y había un restaurante con una terraza, pero nos dijeron que no había carta. Cómo lei enseguida en TripAdvisor que era un pelín caro, seguimos bajando y encontramos una plazoleta con vistas al río, servidas por un pequeño restauración familiar.
Puedes pedir las tapas típicas de Cuenca: ajoarriero, morteruelo, zarajos, etc. Para los niños pedimos pollo empanado con patatas, el dueño nos dijo que el plato era generoso, así que pedimos para los tres niños y el bebé dos raciones solo. Era casero tal como nos indicó y con dos raciones suficiente para cuatro niños pequeños.
La persona que nos atendió que me imagino que era el dueño, era muy amable, atento y paciente. Los baños estaban muy limpios. Los niños pudieron disfrutar en la plaza ya que había espacio para el juego.
No me pareció nada caro.
Lo recomiendo tanto para parejas, como para familias.
Comida excelente en un ambiente idílico. Los platos abundantes, sabrosos y a buen precio. Los camareros atentos y cordiales. El sitio espectacular y tranquilo. Una experiencia inolvidable.
100% recomendable. Magnífica atención, los camareros majísimos y adaptaron las migas y el pisto para mí que soy vegetariana. La comida buenísima, y la terraza es muy bonita, con buenas vistas y tranquila
José Fernando Royo Urbán
+4
Estupendo restaurante del casco antiguo de Cuenca en horario de comida y cena. Raciones muy buenas y abundantes. Personal atento y agradable, y nos han atendido amablemente a pesar de llegar tarde.
Ibamos con 3 niños y es un sitio super tranquilo para comer a sombra de los árboles. La comida riquísima y los camareros muy amables. Muy recomendable.
Muy cómoda la terraza. Bastante buena la comida.
Cenamos fenomenal! La terraza, los tilos, el olor que desprenden... Crean un ambiente muy agradable y especial. El camarero que nos atendió, que dedujimos que era el dueño pues parecía un negocio familiar, muy educado y rápido. Se le veía una persona humilde y fue servicial en todo momento. La comida rica, raciones generosas. Relación calidad- precio correcta. Si volvemos a Cuenca, volveremos sin dudarlo.
Entorno precioso, lejos del bullicio. Personal encantador y comida deliciosa, sin pretensiones y bien cocinada. Precio razonable.
Otro usuario se ha quejado porque no fue atendido a las 10 y es porque la mesa estaba reservada para nosotros. Creo que no es motivo para hacer una mala valoración. Vinimos de turismo, hay muchos platos típicos bien elaborados, un sitio algo escondido pero tranquilo y con muy buenas vistas. El trato fue muy bueno y la cena nos encanto. Gran elección, les deseamos lo mejor.
Todo muy rico. Personal amable pero cuando hay más mesas se nota que van más desbordados. Nosotros fuimos bastante pronto y todo muy bien.
Pedimos el surtido de quesos manchegos, migas, tostada de solomillo con queso de cabra y cebolla caramelizada. La torrija y tarta de zanahoria casera muy rica.
El sitio muy chulo y tranquilo.
Después de subir una cuesta tremenda te encuentras con este maravilloso restaurante , con unas luces de barraca de pueblo y una terraza muy amplia. El camarero Tomas nos aconsejo muy bien y tuvo un trato excepcional con nostros . Las vistas son muy bonitas y el lugar super acogedor . La comida esta muy buena y los precios son correctos . Todo estupendo , un restaurante muy recomendable .
Carta con las especialidades típicas de Cuenca en un entorno espectacular. La oreja y el fuet de chocolate especialmente buenos
Perfecto, personal atento servicial y buenos productos, todo muy rico. 👌
El sitio es precioso, muy tranquilo y con un servicio excelente. Lo que pedimos, delicioso y con buena presentación: tomate con ventresca, migas (increíbles), zarajo, tabla de quesos y codillo. En cuanto a los postres, hacia tiempo que no comia una torrija tan buena. También estaba deliciosa la tarta de zanahoria. Un lugar perfecto para disfrutar de una comida sencilla, de calidad, buen servicio y buen precio en un marco excepcional.
El lugar es idílico y la comida está muy rica (buena relación calidad-precio), tienen muchos platos típicos conquenses. El problema estuvo en la logística de las mesas. Tenían un poco de lío a la hora de gestionar las mesas y de comunicar si había hueco o no a la gente que llegaba sin reserva. Pero el trato posterior fue bastante correcto.
Terraza fabulosa, elegante y con estilo,situada en el corazón de Cuenca; con unas vistas privilegiadas, donde comer una comida de 10. Entre sus especialidades hay que destacar la oreja, las migas y las croquetas caseras, que son un manjar. El servicio es realmente bueno, ya que los camareros son súper agradables y cercanos. Llama especialmente la atención lo cuidado que lo tienen todo, así como la limpieza y la desinfección continua que hacen del inmobiliario. En definitiva, 100% recomendable!!
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