Riquísima toda la comida. Nunca había probado la raya hasta ese día y me encantó cómo la habían preparado. La tarta de queso no es una porción, es una tarta individual (aunque dos personas comen sin problema). Precio razonable para la calidad y la zona.
Una buena opción. Fuimos un lunes al mediodía y tuvimos que esperar unos 40 minutos para sentarnos. Si tenéis esa situación preguntar si tienen sitio arriba, puesto que la espera es para sentarse fuera mayoritariamente. Todos los sitios estaban bastante llenos. Pedimos las croquetas, rabas y arroz negro. Estaba todo muy rico y el servicio muy amable. Tienen cachopo en la carta. Todo casero.
Fuimos el lunes que están las mayoría de los restaurantes cerrados en Cudillero y nos atendieron genial pese a entrar bastante tarde. Probamos las parrochas y el cachopo de cecina que estaban ambos platos espectaculares. Mención especial para la tarta de queso y el arroz con leche buenísimos. La cuenta fue alrededor de 25 por persona.
Quizás no tuvimos suerte el día de la visita, mucha gente, el servicio un poco lento y para más colmo lloviendo. Lo bueno de este restaurante es que las porciones son abundantes, así que con hambre no te marchas. De precio está también bien. La pega? Un poco lentos, la verdad. Por eso he empezado el comentario diciendo que quizás el problema es que hemos ido em temporada alta y había mucha gente. Pienso que 4 estrellas es lo justo.
Mes de julio, no reservan, pero llegamos a las 9 y no tuvimos que esperar. Todo muy bueno, el cabracho muy rico, y los calamares frescos, rebozados sin gluten tras haberlo solicitado, excelentes. Si a eso le acompaña una buena sidra de Nava (Práu Monga, Angelinón), la cena fue perfecta. Me daba un poco mal rollo el 4 que tenía de reseñas, pero creo que a día de hoy (no se cómo funcionaba en el pasado) se merece más.
Localización excelente. Tuvimos que esperar para sentarnos, pero una vez sentados la atención fue muy rápida y la comida muy buena. Pedimos pastel de cabracho, salpicón de bonito y pulpo frito.
Tras unos años sin poder dar una vuelta por Cudillero hemos vuelto en 2023. El Restaurante Paloma, que ya conocíamos, sigue siendo nuestro preferido, por calidad, ambiente y buen trato. No salimos de los pescados, todo riquísimo. Muchas gracias Juan y compañía por acordaros de nosotros tantos años después, da gusto. Volveremos, por supuesto.
La comida espectacular y el servicio de 10. Lo que pudo ser una anécdota desagradable se convirtió en un gesto digno de reseñar. Durante la cena en un despiste una gaviota acechó mi calamar con la consecuente perdida, no dudaron en ofrecerme otro. Volveré, no tengo dudas
Nos sentamos muy rápido .no tuvimos que esperar mucho a q nos trajeran la comida a pesar de toda la gente que había.pedimos una fabada para compartir y un cachopo que estaban impresionantes.eso más dos cervezas y una botella de agua por 49€.
El sitio por excelencia en Cudillero, tanto por su ubicación (terraza frente al puerto) como por su comida y servio. Todo exquisito, comida y trato. Soy celíaca y sé que puedo comer aquí totalmente tranquila. Te adaptan los platos, tienen pan sin gluten y el mousse de limón está de muerte. Sitio totalmente recomendable
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