Un lugar acogedor, fuimos de tapeo y nos gustó, ya que los ingredientes de las tapas son muy buenos.
Lo malo es que es un poco caro y las porciones de las tapas son bastante pequeñas, y el pulpo a la gallega no lleva patata.
El servicio muy correcto, cada camarero tiene una función clara y eso hace que tengan una buena organización.
El local está muy bien situado.
Fuimos a comer sobre la una de la tarde, nos atendieron muy rápido dándonos mesa en el interior. La comida salió súper rápido, mejillones riquísimos y las gambas grandes y muy sabrosas. Como puntos negativos, las moscas que había en el interior (tienen lámpara anti insectos pero mal colocada), pedimos pan y tuvimos que pedir más por lo poco que venía.
Hemos pedido varias tapas para comer: pulpo a la gallega, chipirones, gambas al ajillo y pescadito frito. Todo estaba delicioso, y el servicio ha sido relativamente rápido pese a haber mucha gente en la terraza.
Relación calidad/precio de lo mejorcito de la isla.
Las albóndigas de calamar imprescindibles, los púlpitos estaban buenos, las croquetas de pescado era lo más normal que probamos, pero si quieres llenarte con productos del mar, el calamar relleno no puede faltar.
Totalmente recomendable! Hemos comido en Restaurante Tritón, puerto de Ciudadela, ensalada de queso y aceite de menta, muy rica, un lenguado y café con hielo. Tienen muchas tapas y no es caro en plan picoteo.
Puedes picar algo en plan tapas o tomar un pescado o Carme con ensalada.
Buena atención. Suele tener disponibilidad. Precios buenos aunque un pelín elevados en bebidas. Recomiendo las albóndigas de calamar que, aunque llevan carne (¡ojo gente veggie!) están muy ricas.
Opción perfecta para cenar en el puerto de Ciudadela. Calidad excelente toda la comida (las zamburiñas excelentes, el pescadito frito en su punto, la sepia a la plancha en su punto tambien y racion generosa, y la ensalada muy rica). El servicio, también excelente y atento. Precio razonable (seguir asi por favor) y en una zona preciosa. Para repetir.
Nuestro guía de free tour nos recomendó con creces visitarlo para comer o cenar, y aunque había mucha cola y tuvimos que esperar un buen rato, mereció totalmente la pena.
Las raciones son ingentes y están riquísimas, extra recomendable el pescaíto frito y los chipirones. Repetiremos sin duda, ya sea a comer o cenar
La comida está deliciosa, los precios razonables. El personal muy atento y el servicio rápido a pesar de que siempre hay mucha gente y tiene muchas mesas. Lo recomiendo
María Hernández Sánchez
+5
Un imprescindible si estáis en Ciutadella!! Sus albóndigas de calamar son un espectáculo, sus mejillones al vapor frescos y riquísimos. Los camareros un encanto de amables, atentos y rápidos. Un 10
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