Comida deliciosa, gran variedad de platos, tapas y raciones, a precios razonables. Los botellines de cerveza te los sirven con una tapa a elegir. El Cachopo espectacular, eso sí, tamaño gigante. Es una ración para dos que sean muy comientes, o para compartir con cuatro personas al centro. Las gyozas de langostinos y los chips de berenjenas, deliciosos. Muy buen ambiente, aunque tuvimos un poco de frío dentro, por los techos tan altos, y abovedados, pero merece la pena por ser un lugar con tanta historia, ya que formaba parte del Parque de Artillería.
En la terraza si disponen de estufas. El único inconveniente que veo, es que el WC se encuentra en el local contiguo, por ser parte del mismo grupo de restauración.
El servicio muy atento y amable, nuestro agradecimiento a Anabel, por su gran atención y simpatía.
Totalmente recomendable, repetiremos!
Comida buenísima y precios asequibles.
Muy buena atención.
La única pega que le pondría es que las sillas son algo incómodas, aunque supongo que es la gracia se este sitio.
He ido un par de veces y seguro que volveré.
Buenas tapas a buenos precios. Servicio rápido, no entiendo los comentarios sobre la lentitud....debe haber mucho impaciente. Precio- cálidad...inmejorable. Única pega se la pongo al mollete de calamar frito...muy bueno...pero sería superior si limpiaram por dentro el calamar.
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