El Perro Chico

DELICIOSO!!!! Hemos probado algunos de los platos de la carta y gratamente sorprendidos, platos y sabores diferentes y totalmente acertados, disfrutamos de una comida exquisita, literalmente no había disfrutado antes tanto de la comida con un toque picante, que a mi juicio es ese punto adicional que hace la diferencia, altamente recomendable. Mis felicitaciones al chef, comimos DELICIOSO

Hemos venido a este lugar un montón de veces y nos encanta, de mis restaurantes favoritos en Bilbao! Opciones tanto a carta como el menú del día. La última vez que fuimos comimos un menú del día por 15€ . A carta nos salió unos 15-20€ cabeza cenar. Platos muy originales, con buena presentación y mucho sabor. Atención muy buena aunque algunas veces van un poco lentos, por lo demás todo genial. Nos gustó mucho de la carta el pan con tomate, las gyozas, las pakoras y la tarta de queso. Seguiremos viniendo!

Local agradable, cerca del mercado, tiene vistas al casco viejo. El menú del día (jueves y viernes) cuesta 15€, con cuatro primeros, cuatro segundos y tres postres a elegir, incluye el pan, agua y una bebida (puede ser refresco, cerveza e incluso vino). Pedimos rollito vietnamita y Pad Thai. La salsa agridulce estaba muy buena, con un toque sutil de picante. De segundos, bacalao con quinoa y salsa de piquillo y curry de naranja y calamares. Hay que destacar el precioso color nácar que tenía el bacalao, muy bien cocinado; y una tierra de espumas que le daba un sabor a la brasa. De postre, una cheesecake con salsa de turrón y gallestas, y un brownie con salsa de mango y pistacho. Por ponerle alguna pega, hemos echado en falta nuez en el brownie. Sin duda volveremos!!

Menú de fin de semana, 29€! Algo carete teniendo en cuenta que para grupos de 6 no admiten menú abierto, únicamente menú cerrado. Menú añil. Aún así, todo riquísimo, buena valida de productos! Por destacar, querría mencionar los rollitos vietnamitas, increibles! Las torrijas vienen con un toque de peta veras, que te trasladan a la adolescencia por un minuto!

Un ejemplo de mejora en calidad cada año, me ha sorprendido para bien tras un par de años sin volver. Servicio atento, buena presentación, menú variado y buena cantidad. El local es pequeño, conviene reservar para comer/cenar. Para tomar algo está en una de las mejores zonas actualmente, siempre con muy buen ambiente.

Un clásico de Bilbao. Ubicado en el barrio de Bilbao La Vieja, este local te entra por los ojos por su antigua y preciosa decoración. Escogimos un menú cerrado de 29 euros, platos variados y muy buenos, raciones normales. Recomiendo el solomillo de vaca vieja, tremendo sabor, se deshace como mantequilla. Un gustazo!

Qué local tan chulo! Está situado a unos pasos del mercado de la Ribera. El trato por parte del camarero y la camarera fue super cercano y agradable. Fuimos un jueves a comer, y era menú. El menú no es nada común, son platos super originales y variados... Estaba todo buenísimo y eran raciones abundantes. Sin duda lo recomendaría, y si vuelvo a Bilbao repetiré.

Menú del día muy completo y con muy buenas cantidades. A nosotras nos gustó todo lo que pedimos excepto uno de los platos de arroz al curry con pollo y verduras, nos pareció un poco insípido, pero el resto muy bueno todo. Los platos que ofrecen son elaborados, y hay variedad donde elegir, el menú cuesta 15€ pero aparte también tienen carta, aunque en cuanto a calidad-precio sale mejor el menú. El servicio amable y atento.

Un imprescindible en Bilbao La Vieja. La verdad es que este restaurante me encanta. La calidad de la comida es espectacular. Todavía no he probado algo que no me guste y eso que son platos bastante innovadores. La carta es pequeña y no es demasiado barato, pero merece la pena cada euro que pagas. Las raciones son abundantes, nosotros no pudimos llegar al postre habiendo pedido un entrante y un plato principal cada uno. El local es coqueto, bien aprovechado y bonito y el personal es muy agradable. En definitiva, espectacular. Para repetir.

Estuve el otro día cenando por recomendación de una amiga y he de decir que me encantó. El trato del personal fue excelente, se preocuparon en explicarnos cada plato y en preguntarnos nuestra opinión una vez habíamos terminado. En cuanto a la comida te dan a elegir entre menú o carta. Elegimos varios platos de la carta y todo estaba muy bueno. Yo destacaría la burrata y el salmón. Los postres también son una delicia.