Una tienda espectacular! Productos naturales y muy lindo arreglo! Estuve ahí ayer. Deben probar la limonada casera y comprar miel! Además, tienen muchas cosas de comer como brownies, Magdalenas y Delicia turca.
El mejor helado de pistacho que he probado jamás!!! Está justo en la parada del funicular antes de coger al autobús hacia el Tibidabo. Vistas muy bonitas desde la zona.
perfecta parada si pasas para ir a tibidabo. probé la tarta de matcha/limón vegan y estuvo muy rica. lugar tranquilo y cálido :)
Precioso y acogedor lugar. Mágico!
Una parada ideal para recargar azúcar luego de paseos por los senderos de Collserola.
Volveré siempre
Grandiosa la atención de Lola, nos recibió de maravilla, y Trap el perrito también. El helado espectacular, la ambientación y el granizado de limon super refrescante!!! Lo recomendamos 100%
Encantada con el lugar, muy acogedor y el trato inmejorable. Hemos probado los helados los cuales son artesanos, muy deliciosos, también disponen de sabores únicos pero el brownie se ha robado nuestro corazón. Sin duda regresaré cuando este por Barcelona para seguir degustando sus delicias.
Hermoso cafecito con delicias frescas y locales. Recomiendo la horchata, sus gelattos y empanadas. Lo de dulce también pinta muy bien! Excelente atención.
Deliciosos helados y muy buena limonada con menta y jengibre, en un pequeño local, con productos artesanos, ofrecidos por un agradable y atento servicio.
Probamos los helados de cacao, "coca de llardons" (sic) (¡torta de chicharrones!!), avellana y el de pomelo con menta. Todos deliciosos,... y el de "llardons" sorprendente, con piñones incluidos.
El local es pequeño, pero muy agradable.
Es difícil aparcar cerca.
Guillermo Lopez-Balcells
+5
Espectacular! Pequeño y con encanto, con vistas a toda la ciudad de Barcelona desde vallvidrera. Pero sin duda lo mejor la comida, helados caseros inhumanos, gofres super sabrosos! Unas empanadas increíbles! Y los pastelitos son otro nivel!
Ideal para merendar o parar a desayunar!
Bonito y acogedor local.
Me encanta las cositas artísticas que tiene y la mezcla de las plantas en su decoración.
No soy sumamente de dulce pero aquel día pedí un gofre el cual no era sumamente dulce y con el helado quedaba perfecto.
Es un bonito refugio para desconectar.
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