Carlitos

Como vecinos estamos encantados con la reciente nueva propiedad. Se ha transformado de restaurante a discoteca. Los fines d semana es muy agradable que toda tu casa tiemble por la música tan alta. Dudo que un restaurante pueda (tenga permiso) montar tan descomunal estruendo. Ya Hemos llamado varias veces ya y parece que no hay solución. Una pena.

Un restaurante donde me gustaría volver, en pareja o familia, con amigos...El trato desde reservar un salón para una despedida hasta recoger la mesa ha sido espectacular. Los camareros están bien informados sobre platos aptos para celíacos, hasta preparar aparte los entrantes para evitar contaminación cruzada, los cuales estaban buenos. Probamos las bravas, queso provolone, ensalada con queso de cabra y croquetas (el único que no podía probar). El salmón me gustó mucho también. Agradezco que hicieran un gran esfuerzo para coordinar servir la cena con la charla que dimos y me sabía mal que empezáramos tarde; seguro no disfrutamos tanto como debíamos, lo cual no es su culpa. Eran muy atentos y agradables, volvería sin duda.

Estuve en una celebración de cumpleaños, en la sala que tienen para eventos / celebraciones, y la verdad es que no pudimos pasarlo mejor. La oferta gastronómica riquísima, y el trato del personal inmejorable. Estuvieron muy pendientes de nosotros y muy enfocados en que disfrutáramos de la experiencia de principio a fin. El local es muy acogedor y la ubicación céntrica, al lado de Turó Park. Volveremos seguro la próxima vez para probar la terraza y disfrutar del sol. Enhorabuena!!!