Suculent

Un aplauso a Jordi, que nos atendió fabulosamente. Nuestros favoritos del menu clasico: La raya, la setas y la tarta de queso. Lo demas tambien espectacular. El tuetano y el cordero, por lo dificil de que queden tan bien, merecen ser mencionado. El maridaje tambien espectacular, buen cava y buenisimos vinos muy acertados con la comida. Volveremos para explorar la carta porque nos quedamos con ganas de mas.

Tenía muchas ganas de conocer este restaurante, ya que al cerrar los fines de semana es difícil poder venir, pero por fin lo he conseguido y ha merecido mucho la pena, tomamos el menú degustación Suculent y estuvo formidable, gran calidad en la materia prima con un toque muy personal, que hace que cada plato sea un espectáculo. Muy buena relación calidad precio y un servicio muy agradable y cercano.

Riquísimo y sorprendente. Fuimos el pasado jueves a comer y fue una experiencia increíble! Pedimos el menú degustación Clàssic. Estoy segura de que detrás de cada uno de ellos había muchísimo trabajo para conseguir que fueran exquisitos. Me encantó también la atención del camarero, que nos explicaba todo con mucho detalle.

Pedimos menú degustación recomendado por Jordi el camarero. A destacar lo primero la atención, que en sitio que ya sabes que vas a comer bien, dar con un camarero como Jordi nos hizo pensar incluso que era el jefe, la forma de describir los platos, recomendar y hacer que te dejes llevar es extraño de encontrar hoy en día, hay poco como él y me dedico a esto…. La comida es productazo, tratado con cariño y sin elaboraciones excesivas, tocando lo justo el producto. Nos encantó, íbamos con expectativas altas y se cumplieron casi con el primer plato. Los vinos que me fue sirviendo Jordi por copa muy ricos también. Chapó 👌

Fuimos en pareja a cenar a este restaurante y tomamos el menú degustación Suculent. La atención por parte del camarero que nos atendió fue muy buena en todo momento, se notaba que entendía y que disfrutaba de su trabajo. En nuestro caso estuvimos sentados al fondo del restaurante, y para acceder es necesario cruzar la cocina, fue algo que nos pareció muy original y que nos gustó mucho, al ser algo poco habitual. En cuanto al menú, hubo un poco de todo: algunos platos nos encantaron, y los repetiríamos una y mil veces, aunque otros por desgracia no nos gustaron tanto, supongo que hay sabores y ciertos productos con los que es más complicado acertar con todo el mundo, y además las expectativas en estos menús degustación, al tener un precio elevado, suelen ser muy altas. Recomiendo probarlo ya que en nuestro caso la experiencia fue muy buena gracias al camarero.