Bar Ramon

Parece mentira q yo siendo del barrio nunca hubiese ido. " Se ha desbloqueado nuevo sitio favorito.". la comida de 10, croquetas , chipirones , el brie.. sin palabras.. el trato de 10, el servicio de 10. El precio muy acorde con la calidad q estás comiendo... Eso sí RESERVA , no puedes sin porque está lleno siempre. Sólo falta una cosa para la perfección absoluta : un plato de jamón...

Bar clásico de esos de “los de toda la vida”, con un menú que mantiene el sabor y el cariño al prepararlo. Platos para compartir (o no), con clásicos que hacen que uno regrese y salga siempre con sonrisas y la sensación de haber comido bien. Cerveza servida en jarras opacas, espacio limitado. Conviene reservar y asumir que hay turnos. Un clásico muy recomendable.

Tras varios intentos fallidos por lleno, el otro día conseguí ir a este bar altamente recomendado, y no me decepcionó. El local es pequeñito y las mesas de cuatro un poco justas, pero el ambiente es estupendo, gracias a la música y la decoración/fotos de las paredes, que incluyen una carta del restaurante de 1972. La comida es buenísima, sin mucha floritura. Comimos anchoas, croquetas de cabrales, chipirones andaluza, calabaza con rocafort, albóndigas en salsa de chocolate y vino, zamburiñas y cigalitas. Estas dos útimas eran espectacularmente buenas, y también me pareció excelente la calabaza y las croquetas de cabrales. Y delicioso el hojaldre con nata. La carta es bastante extensa y cambia según la temporada. La mujer que nos atendió, rápida y agradable, conoce el oficio y también nos ayudó a elegir. La relación calidad precio, excelente. A repetir, ¡y pronto!