Restaurante Du Liban

Un sitio precioso y súper recomendado. Comida libanesa muy buena, el camarero majisimo, nos recomendó una serie de platos y a cada cual más bueno. He comido 2 personas, con una copa de vino cada uno, 2 entrantes y un plato principal más postre y hemos salido a 33€ por cabeza, así que barato no es, pero como experiencia para comer y probar esta increíble

Du Liban es mi restaurante Libanés de Madrid preferido !! La verdad he visitado algunos cuantos pero no tienen nada que ver con su espectacular comida, el restaurante está muy bien decorado, el ambiente es acogedor y el personal encantador! Suelo ordenar el humus con carne de cordero, shawarma en cualquier presentación, tabulé, kebab, cordero, pollo a la brasa … es decir casi todos sus platos los conozco y no me han defraudado!

Espectacular libanés de la moraleja, el mejor que podéis encontrar en madrid. La mezcla de sabores gracias a sus especias es acojonante y la calidad de sus carnes hace que sea un sitio de calidad precio insuperable. Pedimos: Hummus Du Liban Sauté de Cordero Pollo a la brasa Si vais también el Shawarma de Ternera que en esta ocasión no pedimos esta también espectacular, pero estos tres platos son imprescindibles. El hummus el mejor que he probado en mi vida, el Sauté lleva una salsa que con patatas fritas es irresistible y el pollo a la brasa con un sabor espectacular. El servicio es exquisito y la atención es excepcional. En definitiva, un encanto de sitio con una terraza muy agradable y con una comida libanesa sublime. Precio medio: 25€/persona

Fuimos atraídos por las buenas opiniones y no desmerece en absoluto. El local está limpio y es bonito y agradable. Una ligera música que se agradece, ameniza la velada. Pedimos de más, pero la persona que nos atendió nos recomendó quitar algún plato y compartir otros, cosa que se agradece y es un gran punto a favor. Entre lo que pedimos: Zaatar. Mini pizza al horno de pan Libanés al horno con tomillo sumac semillas de sésamo y aceite de oliva. Super rico! Samak ras asfour. Saute de bacalao con ajo, limón y harissa. Estaba espectacular, picaba un poco. Farouj meshwe. Pollo coquelet deshuesado marinado y a la parrilla. Quizá lo mejor, pero lo demás estaba tan bueno o mejor. Mucha mezcla de sabores! Hummus har. Ligeramente picante. Buenísimo, lo trajeron con pan de pita, que pensamos que venía con el hummus pero era servicio de pan. Se nos quedó un poco corto, de haberlo sabido hubiéramos pedido un poco más de pan. Si es cierto que en la carta pone lo del servicio de pan, pero al traerlo junto al hummus nos creó esa confusión. Pese a este punto negativo, doy 5 estrellas porque todo estaba muy bueno y la atención fue muy buena.

Nos encanta este restaurante: el espacio, el ambiente, el personal… Y cómo no, la comida! Súper rica y muy lograda! Quizás un poco cara, pero la zona lo es en general. Tanto el hummus (10€) como el hummus du liban (con cordero y piñones) y el Tabbouleh (11€), son de los mejores de la capital!! Por no hablar de sus carnes y su pan pita elaborado al momento! Un sitio muy recomendable!!

Nos gustó mucho el lugar, la comida y el servicio. No nos pareció correcto que nos trajeran pan sin preguntar (se supone que es de cortesía si no se consulta) y luego resultó que costaba 2,5 euros por persona !? (1 pan pequeño!) Sería más transparente avisar. Si no fuera por este detalle se ganaban las 5 estrellas.

Vivimos una grata experiencia en Du Liban anoche con unos amigos. El ambiente del local es bonito y acogedor. La música bien, aunque se distorsionaba por momentos, cosa que nos llamó la atención porque de repente el altavoz emitía un ruido bastante molesto. Sin embargo y obviando este detalle, la atención de los camareros, en especial de Medi fue exquisita y en todo momento nos supo aconsejar y orientar acerca de los platos, además con un gran sentido del humor. La comida espectacular sin duda, los diferentes platos nos sorprendieron desde los rollitos de queso y los envueltos de hoja de parra hasta el shawarma de pollo y cordero. La tarta de queso también muy buena. Pedimos cerveza, vino y terminamos con unos pisco sour de maracuyá que estaban espectaculares. La única pega el precio...pagamos 195€ por los cuatro.

Restaurante muy coqueto tanto por el interior cómo su terraza. La puesta en escena, con música árabe es exquisita. La comida buenísima a un precio muy razonable, lo que es distinto es el pastel de queso. Y lo que se comenta que los camareros no te saben aconsejar...(uno que llevaba coleta muy bien!). Eso sí, una cerveza doble águila sin filtrar 4,50€, agua grande 4€ ( bueno estamos en el corazón de la moraleja...)