Delirio Restaurante

Toda una experiencia. Las fotos que he subido no hacen justicia a lo bonito que es este local. Se nota que han cuidado hasta el más mínimo detalle para conseguir una ambientación única. Nosotros nos pedimos el risotto por las fotos que habíamos visto en redes sociales y no decepcionó, estaba buenísimo. Cuidan mucho la presentación de todos los platos y casi merece la pena probar toda la carta solo por ver cómo relacionan la temática De Goya con cada comida. El servicio fue muy amable y muy rápido. Repetiría sin dudarlo.

Nos pedimos un taburete de ensaladilla con ventresca, unas croquetas, un carpaccio de cerdo, un risotto, un entrecot con tuétano y tarta de queso y el tiramisú. Todo sencillamente riquísimo. A destacar la presentación del carpaccio, mis dieces a quien tuviese la idea. El servicio super bueno, súper atento el chico que nos atendió y muy original lo de que Goya anduviese por el local, se conserva bien.

Todo de 10, comida, servicio y decoración. Cogimos unas patatas bravas que estaban riquísimas, un cofre de croquetas, una pizza que estaba espectacular y una fideuá con longaniza de Graus. Todo exquisito y las raciones generosas. De beber una botella de vino australiano, dos copas de cerveza y dos cafés con hielo. La cuenta ascendió a casi 31 euros por persona. Muy bien de precio para la calidad ofrecida y el trato maravilloso de los camareros. Volveremos, muchas gracias!

Hemos ido a comer 5 amigos y hemos salidos llenos disfrutando de la comida como hacía mucho que no disfrutaba. El risotto, la fideua espectaculares. Muy recomendado para disfrutar la comida este restaurante. Los camareros de 10 y uno de ellos llevaba una chistera, espero que la próxima vez nos haga un truco de magia. Local muy bien ambientado.

Fuimos dos personas para cenar. El lugar estaba a tope y nos sentaron en una mesa al lado de la puerta. Desde el primer momento la atención fue excelente y los camareros nos ofrecieron sus recomendaciones en base a la idea que llevábamos. Pedimos, todo para compartir, Alcachofas con huevo a baja temperatura, zamburiñas, el risotto y la falda de ternasco. Alcachofas: Quizá el peor plato dentro de lo bueno que fue, para mi gusto, el huevo se llevaba todo el sabor y las alcachofas un poco insulsas. Si es cierto que el conjunto era muy cremoso y agradable. Zamburiñas: Exquisitas, la mayonesa de ajo espectacular. Eso si, cuidado con el exceso de sal en el que son presentadas, se pega a la concha y os puede aguar la fiesta. Risotto: Si os gusta el queso, es vuestro plato sin dudas. Excelente presentación y sabor. Falda de Ternasco: Cuando la probamos, ya estábamos hasta arriba y quizá por eso no pudimos apreciarlo bien. Cuidado con la salsa, pica mucho. La carne se deshace. Comentar que, debido a la tardanza entre los entrantes y el risotto, la casa nos invitó a un plato de ensaladilla de remolacha coronada con huevo poché. Estaba muy buena. Agradecemos el detalle de la casa. Totalmente recomendable.

Parece que estás dentro de uno de los cuadros de Goya. La decoración es genial, y si traes a alguien fuera de Zaragoza, es una buena forma de darle a conocer al genio de la pintura. Servicio perfecto. La comida está buenísima y la presentación de los platos es muy original, como "la paleta". Muy recomendable