La Ultramarina

Estupendo lugar, aunque por su reducido tamaño será complicado volver a tener mesa especialmente en días señalados. La comida y bebida excelente y se puede comer a un precio adecuado. Un pero, la lechuga y el tomate de la ensalada de la casa carecían del nivel del resto de los ingredientes. La atención estupenda, amables y dispuestos y el ambiente, siendo un espacio reducido, muy agradable

Lo primero quiero destacar por encima de todo la amabilidad y disposición de Adrián para que pases una buena velada, dar consejo y escuchar cualquier comentario. De 10. Taberna gastronómica orientada 100% al producto, con preparaciones muy correctas sin grandes florituras. Mesas altas y un poco juntas. Hay que reservar. En nuestra primera visita pedimos unas zamburiñas (bien ejecutadas), un plato de gamba roja (6 un.) un poco pequeñas pero sabrosas, unos chipirones con pimientos de padrón y alioli de azafrán que estaban frescos y tiernos: el azafrán del alioli es imperceptible, solo da color pero la salsa está suave y combina bien, y un carpaccio de chuletón con parmesano muy rico aunque para nuestro gusto frío en exceso y ligeramente pasado de pimienta. Repito que es muy de agradecer que escuchará nuestra opinión a este respecto. De postre pedimos una torrija de brioche con helado negro de vainilla y un helado de turrón casero con PX (espectacular..). Precio adecuado al producto. Volveremos para probar más cosas.

La experiencia en este lugar fue simplemente increíble. El servicio fue excepcional y la forma en que explicaron el menú fue única. Todos los platos estaban deliciosos y bien preparados. Sin duda, el punto culminante fue la torrija, un verdadero deleite para el paladar. Una visita obligada para los amantes de la buena comida.