Paseo 42 Venezolano Argentino

Cuándo recordé hacerle foto, ya quedaba poco en el plato Todo muy rico, tanto la milanesa, la entraña, los bocatas y las patatas, estaban de 10. El local pasa por desapercibido, pero sin duda merece probarlo. Para repetir. La única pega que le pondría, sería la espera para la comida, que tardó algo cerca de una hora. Aclarar que eramos 7 y siendo nou d'octubre se agradeció encontrar algo abierto. Sin duda la comida mereció la espera.

Toda la comida que sirven es casera, por lo que el cliente debe entender que los tiempos de espera pueden ser algo más altos de lo normal, más teniendo en cuenta que son 2 personas atendiendo y más aún si el local tiene muchos clientes. Como digo, todo casero, sabroso y con una hermosa presentación. Y el precio no es para nada elevado; uno paga lo que come. El personal muy agradable y sin duda repetiré.

Como venezolana radicada en Argentina, me encantó encontrar éste pequeño y acogedor restaurante donde podrás comer los platos típicos de Argentina y de Venezuela en un mismo sitio. La verdad que es una excelente opción para pasar un rato agradable con la familia o picar algo con los amigos. Tienen desde empanadas, tequeños y arepas, hasta la típica milanesa argentina. No dejes de probar los jugos naturales, yo tomé el de guanabana, y me supo a gloria. No es un lugar lujoso, pero está bueno para salir a comer de vez en cuando.

4 estrellas porque la atención debla Chica fue excepcional. Muy atenta, conversadora y educada. Eso se merece mucho reconocimiento. Lo demás definí puede mejorar. Las empanadas Argentinas estuvieron bien presentadas. Sin embargo, el relleno estaba soso y seco. Hemos probado empanadas es otros sitios y de verdad que estas estaban deficientes en sabor y jugosidad. Nos pedimos la entraña y la verdad es que no caí en cuenta de avisar que nos gustaba la carne poco hecha. Aunque reconozco mi responsabilidad al no decirlo, creo que es la función del camarero preguntar siempre. El único fallo de la chica camarera fue no preguntar y al llegar el plato, la carne estaba casi suela de zapato para mi gusto. Hay que reconocer que la carne era de buena calidad. En condiciones normales la hubiese devuelto, pero estaba de "pasable a buena" así que decidimos tomarla. También este es un sitio pequeño y se ve que los chicos son unos currantes, así que en un sitio como este les haces daño económicamente si les devuelves platos como éste. Fuimos a este sitio porque ofrecían comida venezolana. De comida venezolana tienen poco. Pero la cachapa estaba bien. El otro punto a favor fueros los precios, que también estaban bien. Obviamente la terraza es un plus en verano. Recomendable siempre y cuando mejoren el relleno de las empanadas y se aseguren de preguntar el término de cocción de la carne