Shintori Teppanyaki

Es un restaurante en el que todas las veces que he ido, nunca ha sido igual. Aunque pidiera un mismo plato, no me sabe igual. Y eso es muy bueno, pues hace que no te canses de volver. Y encima ampliaron los vinos Albariños, así que no puedo pedir más. Siempre que voy disfruto tanto que se pasa el tiempo volando y cerramos el local 😊

No le puedo dar un 5 porque éramos 2 y mi comida llegó mucho después que la de mi marido. Yo pedí pato cantones y al reclamar me dijeron que ese plato tardaba más. De ser así deberían decirlo y calcular para servir ambos platos a la vez. De resto un 10 de 10. Sentamos en mesa no en el teriyaki. Pedo sopa Thai pato catones pollo curry arroces y los postres. La creo un poco basta pero mi Cheesecake de jengibre fue la estrella de la noche.

El servicio es muy atento y amable. El local algo oscuro para mi gusto. Es amplio y no te sientes apretujado. La comida muy buena, mucha variedad para elegir. Como pega diré que el sushi no está muy bueno. Yo me ceñiría más a la gastronomía china, ya que noté un gran contraste en la calidad entre la cocina china y japonesa. El sitio es algo caro para mi gusto, pero no deja de ser una experiencia diferente, por lo que vale la pena probar. Si te he ayudado, tu puedes ayudarme a mi y a otros usuarios dejando un me gusta en esta reseña.

A veces pasar de casualidad por algunos restaurantes que de entrada te parece llamar la atención y entras para disfrutar de una experiencia, lo cierto que lo es, pero bajo mi punto de vista, que la gente hable prácticamente a gritos hace que no disfrutes de una experiencia que puede ser única. La atención en mesa, no es la misma que estar en la zona de plancha, donde la atención es más personas y detallista. Nosotros (3 personas), estuvimos en la zona de mesas, donde la atención no es la misma y aunque es buena, le falta cercanía. Por otro lado, nos decantamos por el menú A, además de una sopa de thai, Wan tum frito y maki. Ha estado todo bastante bueno, pero no me ha sorprendido, no me ha resultado un "wooww", pero vuelvo a decir que todo ha estado bueno. (añado las fotos del menú además de postre)

El sitio está muy bien, limpio, guardan las distancias de seguridad entre comensales. El personal es muy atento y simpático en especial el cocinero con su habilidad cocinando. La comida está realmente buena y la presentación va a juego con la comida. Tenéis mesas o la barra de la cocina para comer donde hay un genio simpatico y habilidoso.