El Callejón

Espectacular restaurante!!! Atención de 10, comida de gran calidad, producto fresco y muy bien cocinado. Lo encontramos de casualidad para cenar y volvimos al día siguiente a comer. Sin duda volveré cuando pise de nuevo por Torrevieja. Enhorabuena!!! Se nota que os apasiona lo que hacéis y conseguís que el cliente quede mucho más que satisfecho.

Llevo años de veraneo a Torrevieja y El callejón es uno de los sitios que más me han encantado. Discreto tranquilo, comida espectacular, si te gusta la carne es deliciosa. Las zamburiñas con carne increíble. Repetiría sin dudarlo. Un consejo: si quieres comer auténtica comida española y disfrútala. Ven a esta local. Es de 10. Merece la pena. Muchas gracias. La experiencia muy buena.

Buen sitio en buena zona de Torrevieja,con terraza o interior , cenamos muy bien , unas ostras estupendas, zamburiñas muy ricas, crep de marisco....buen genero, todo nos supo a gloria! La atencion del camarero Pedro muy buena! Gracias por tu atencion.Volvimos a cenar la noche antes de irnos de Torrevieja, esta vez en la terraza atendidos por el camarero de marruecos¡muy simpatico!y muy agradecidos por la atencion del dueño y los detalles que tuvo con nosotros. Recomiendo este lugar ! Porsupuesto! Buena atencion, buen producto fresco para degustar, buen sitio....lo tiene todo! MUCHAS GRACIAS A ESTE PERFECTO SITIO.

Local situado en el centro de Torrevieja en zona peatonal, cogimos el llamado menú picapica que vale 50 € dos personas, compuesto de 4 entrantes a compartir, dos segundos a elegir carne o pescado, botella de vino, sorbete y café. En general está bien en relación calidad precio. Entrantes: lacón (con exceso de aceite), mejillones al vapor, ensalada y cuatro croquetas. Segundo, pedimos bacalao y secreto con salsa pedro Ximénez, luego tuvimos el sorbete y café. El vino pedimos tinto y sacaron una botella sin descorchar (se agradece), un vino joven del año y nos gustó. El servicio fue rápido y en general estuvimos bien atendidos. como nota negativa fue la entrada de unas 7 personas las cuales estuvieron todo el tiempo hablando en voz alta (por eso nos conocen cuando salimos al extranjero), y haciéndonos participe de su vida la cual no me interesa para nada todo ello en una terraza exterior donde estábamos unas 6 mesas ocupadas. Sobre esto no comentamos nada a los camareros ni ponerles en un aprieto y así poder terminar tranquilos, aunque con dolor de cabeza.