Azucar Cafeteria

Después de desayunar en repetidas ocasiones, recomiendo este establecimiento por los siguientes motivos: café de calidad y servido a la temperatura deseada, bocadillos excelentes (nuestro preferido es el "pitufo catalana"), servicio muy correcto, limpieza, precios razonables y fantástica ubicación en la céntrica Calle del Mar, con mesas en el exterior.

Este establecimiento mezcla varias estéticas como la británica, la árabe, pero, sobretodo, un modernismo naturalista, con luces colgantes como racimos de flores que alumbran la velada. La música no es sobresaliente, al menos a la sazón, pero no incomoda las reuniones, que ya es suficiente. El ambiente interior queda un poco recargado; por lo menos mantiene la temperatura a un nivel agradable. El ambiente exterior empeora la impresión interior, no resaltado los puntos positivos que posee. El trato es bastante aceptable, salvo una vez atendidos, ya que no se revisan las inquietudes que pudieren manifestar los clientes. Las mesas no están equilibradas. La comida tenía buena presentación; el zumo no excedía en cualidad, tampoco las tortitas, pero cumplen con su función nutritiva-golosa. El precio se corresponde a la localización (fácil accesibilidad, zona concurrida y cuidada); puede resultar un poco caro, pero es entendible por todas las circunstancias económicas. Sin duda, un lugar agradable para pasar el rato, ideal para una quedada informal o una reunión de amigos. Recomendable.