Comemos menú semanal. Estuvo muy sabroso. Lo mejor fue postre. Toda la comida tiene calidad y se preparó muy muy rico. Ambiente es muy tranquilo. Servicio es perfecto.
El menú espectacular. El trabajo del chef es muy bueno. Equilibra los platos y hace que la experiencia gastronómica sea muy satisfactoria. Servicio especial que hace que la velada sea agradable. Fue un tres en uno. Vermut, cena y copa a un precio muy bueno. Por nuestra parte volveremos siempre que p
Ambiente exquisito. Cocina para disfrutones! Todo estaba buenísimo. El vino blanco tan fresquito que entraba solo (Algo÷) me quedo con el nombre porque lo voy a buscar. Niguiris con huevo de codorniz. Hemos tomado otros niguiris sugerencia de la casa que estaban igual de ricos que los anteriores. D
Impresionante (como siempre). Comida exquisita, combinando lo tradicional con la innovación; sabores muy trabajados, con una carta "corta" (además de sus originales fuera de carta) ofrecen una variedad interesante. Trato excelente, correcto pero cercano. Pedimos croquetas variadas, rejo de pulpo, pr
Una experiencia de diez.
Ceviche espectacular, pulpo super rico y los rollos de vacuno también.
Lo peor el postre, un tiramisú reconstruido con mucho sabor a amarena, no estaba malo pero no fue de mi agrado.
Aún así volvería sin dudarlo.
La comida está muy muy rica. Me pareció un poco caro para la cantidad que ponían en algunos platos, pero hay que reconocer que la calidad, el sabor y el servicio son muy buenos. Lo recomiendo!
Este lugar me ha sorprendido, pedimos un menú desgustacion, calidad precio ha sido perfecto, las presentaciones de los platos la comida la atención es un lugar con mención michelín, volveremos
Simplemente INCREÍBLE, no puedo decir ningún pero, espectacular desde el entorno a su comida, pasando por el magnífico servicio. Trío de aperitivos: ensaladilla de Papa canaria, pesto con crujientes de batatas y queso con manzana. Entrantes: cesar con roast beef, huevos rotos con setas de temporada;
Magnífico restaurante situado en la bajada del Portezuelo,. bien señalizado. Sala amplia, bien decorada y con unos ventanales que dejan ver el maravilloso paisaje de la zona. La sala a cargo de Damaris, muy bien organizada, personal amable, cordial y perfecto conocedor de las viandas que salen de
Volver al Restaurante La Sandunga donde el ambiente, el servicio y la comida siguen siendo la seña de identidad, es revivir una experiencia culinaria inigualable. Felicidades a todo el equipo de La Sandunga.
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