Bottega Italia

Me encantó, cenamos muy bien. Tienen una gran variedad de comida "del día" además de un menú con diferentes pastas con distintas salsas, que puedes combinar como quieras. Incluso puedes pedir comida al estilo "tapas" y compartirla. Los postres están buenísimos y me quedé con ganas de probar más cosas osea que me tocará volver. Si bien el restaurante no es muy grande, nosotros fuimos un viernes por la noche y tuvimos que esperar únicamente unos 5 minutos antes de tener mesa. Hay mesas en el interior y algunas en la puerta. A nosotros nos atendieron muy rápido y la comida llegó en poco tiempo a la mesa 🔝

Sólo puedo decir que he saboreado auténtica comida italiana; un local pequeño pero acogedor regentado por una familia nativa de Italia que nos trae sus platos de origen a la mesa. Por lo general, preparan grandes bandejas de comida desde bien temprano para que los clientes puedan ir distintas porciones de lasaña, canelones, pizzas etc (todo ello a un precio de entre 2-4 euros por unidad), lo cual me parece bastante interesante ya que puedes pedir un entrantes ya listo mientras escoges tus opciones. Hablando del servicio, como he dicho antes, el negocio es dirigido por una familia nativa, donde te maravillará su español con acento italiano; por no olvidarme de un trato tan cariñoso y cercano por su parte, pendientes de que disfrutes cada plato que te sirven y siempre con una sonrisa (De hecho, que nadie se sorprenda si aparece el cocinero en una mesa y pregunte al cliente por qué le ha servido un plato bien lleno de pasta y se lo han dejado bien limpio). En cuanto a la carta, adelantarte de que destacan sus platos de pizza, pasta, canelones y lasañas. Los nombres están en italiano y quizás no sepas muy bien qué ingredientes lleva cada uno, así que no tengas miedo en preguntarle al dueño; te aconsejará con mucho gusto. Finalmente, qué decir de sus platos. La relación calidad-precio no baja del sobresaliente, todo lo que se prepara es casero con artesanía pero al mismo tiempo con exquisitez. A diferencia de otros restaurantes italianos, aquí te encontrarás recetas que sólo podrías encontrar en los pequeños pueblos de Italia; platos que se alejan más de la cocina típica para apegarse más al estilo tradicional y pueblerino. Lo mejor de todo son las pizzas, ya que tienes para escoger el tamaño, desde una porción (2€) hasta una bandeja (15€) para toda la familia. Tampoco me olvido de los postres, todos caseros y siguiendo las auténticas tradiciones italianas. Además, tienes la opción de llevarte la comida restante debido a que disponen de muchos tápers de aluminio, que me parece muy inteligente sobre todo si quieres pedir la comida en el local y llevártela al domicilio. Si tuviese que dar alguna pega, sería el tamaño del recinto, ya que apenas tiene media docena de mesas en total; por lo que sería una escapada deliciosa si vas solo o en pareja, pero no para grandes familias (salvo que quieras pedir a domicilio). En conclusión, un auténtico local italiano con exquisitos platos caseros y tradicional preparados por una familia nativa muy cariñosa. Sin duda que ha marcado su territorio en mi memoria y en mi paladar

Ricos platos italianos como hecho en casa. Todo esta espectacular. Atención amable. Precio, calidad y cantidad correcto.

La comida es espectacular, su pizza es increíble por la calidad de sus ingredientes y por su masa, sus postres son riquísimos sobre todo el tiramisú. El camarero Pablo es cercano y agradable, nos verán por allí más de una vez.

El mejor sitio para ir cualquier día y saber que vas a comer rico, por buen precio y con un servicio excelente. Además puedes llevarte a casa sus platos y postres, la verdad que todo es especial pero destacaría las pastas, que son frescas y hechas al momento para ti y el tiramisu, eso ya con poca objetividad, pero es fantástico 🤍