En varias ocasiones hemos probado restaurante de la misma cadena y lo que nos llama la atención es la poca variedad de platos entre unos restaurantes y otros. Aunque mantengan el mismo estilo y mantengan platos estrellas en común la carta debería ser más extensa y diferente entre unos y otros. La calidad del servicio es buenísima y la comida está súper rica, acierto seguro pero a tener en cuenta deberían esto que comentamos.
No le doy las 5 estrellas por el servicio. El camarero que nos atendió, Agoney, fue un poco borde y descortés en varias ocasiones. Entiendo que era un día ajetreado y no me puedo quejar de la velocidad a la que se nos atendió, pero ser amable me parece lo mínimo. Por lo demás, muy buena la comida y el sitio muy bonito.
Adjunto el ticket para 7 personas.
Del grupo perro viejo.. nos encanto seis tapas además Alvaro nos atendió y recomendó súper bien!! La ensalada de tomates, langostinos y aguacate la repetimos y el pollo teriyaki también!
Volveremos sin duda!
Muy bueno todo y bien presentado, muy amable el personal y el lugar muy agradable, para mí gusto un poco lentos en el servir. Pero seguro volveré
La comida está muy rica pero demasiado salada, a pesar de estar acostumbrados a tomar bastante sal.
No era en un único plato, sino en general, en todo lo que pedimos. Tiene solución si se avisa de antemano a los camareros.
Como aspecto a mejorar, es que no deberían retirar los platos a los comensales tan rápido, pues da sensación de agobio, y el local tenía muchas mesas disponibles.
Tampoco es agradable sentarse a menos de un metro de la mesa de al lado estando medio local libre. Entendemos que quizá sea para recibir un trato más rápido o que los camareros puedan tener las mesas más controladas, pero no es algo cómodo.
A nuestro gusto, el aire acondicionado estaba muy frío. Al entrar al establecimiento quizá se agradece, pero luego se puede llegar a estar incómodo.
Es una critica contructiva, pero sin duda repetiríamos el lugar. El personal es muy antento. La decoración del local es muy bonita y la emplatación es digna de apreciar.
Fuimos cinco amigas, sin reserva y nos sentaron súper rápido. El camarero que nos atendió un poco lento a la hora de traer las cosas, tres viajes para traer dos botellas de agua y un refresco. A la hora de sacar la comida un poco lento, pero todo muy muy rico, a nivel calidad precio súper recomendable. El local es muy bonito y acogedor. Pedimos la pizza de guanciale y la de burrata con jamón ibérico, súper recomendables ambas, el pollo teriyaki increíble, las croquetas de jamón también. Sin embargo el canelón de rabo de toro sin más y muy caro, la tapa (1 canelón 9€) y las croquetas de gambas al ajillo, sobre todo saben a ajo, lleva mucha cantidad y mata el sabor. De postre torrija. Muy muy lentos para traer la cuenta, el servicio es un aspecto a mejorar.
Un sitio muy recomendable en el centro de Sevilla, qué gran descubrimiento.
Fuimos porque tenemos el apartamento muy cerquita y nos llamó la atención el menú.
Desde que entramos el servicio de 10, todos los camareros son muy amables.
Probamos varias tapas para compartir, todo estaba increíble. La ensalada de tomate con langostinos es muy fresquita y perfecta para estos días tan calurosos. La tapa de queso muy bien, la mermelada de tomate estaba muy rica. El canelón de rabo de toro para mi lo mejor, las gyozas de pollo muy recomendables también. Las bravas están muy ricas, vienen con mucha salsa.
Para beber probamos vino y rebujito, y después el camarero nos recomendó un cocktail de la casa, que es como una piña colada con curry. Nos llamó muchísimo la atención y lo pedimos, lo recomiendo encarecidamente. Si te gusta el curry te va a encantar, no mata el sabor de la piña colada en si y le da un toque muy exótico y diferente. Además está muy bien de precio, nos costó 8€.
En general los precios muy justos con la calidad, gastamos algo más de 25€ por persona y cenamos muy bien, con postre (una tarta de queso muy rica), vinos y un cocktail.
Creo que la torrija es un postre muy original pero estábamos demasiado llenos como para probarla.
Totalmente recomendable, además el local en si es precioso.
Bonita decoración, bueno y cálido el ambiente, acogedor, en pleno centro de Sevilla. La carta tiene de todo un poco, y merece la pena ya sea para pedir tapas o para pedir platos. Recomiendo pedir variado y probar porque los sabores tienen su cosa, muy personales. Importante... Deja hueco para el postre y pídete la torrija, porque es uno de los platos estrella!
Fuimos 3 amigas y estuvimos muy tranquilas. El servicio es muy atento y haciendo buenas sugerencias. Recomiendo (si gusta un poco de pique) las gyozas y el pollo Teriyaki!! Los canelones de rabo de toro muy buenos (pero algo densos para mi gusto). Ambiente muy agradable. Tras la comida puedes tomarte una copa allí ya que no cierran!!
Comida deliciosa y trato excelente.
Pedimos entrecot con puré trufado que estaba muy rico (aunque si que es cierto que el entrecot era un poco escaso).
También pedimos pizza de guanciale con salsa de boniato, buena calidad/precio, grande y rica.
Para terminar, pedimos torrija de happy hipo (recomendadisima).
Volveremos.
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