La Parrala

Fuimos a comer cuatro personas y compartimos todos los platos porque en cuanto los ves, no quieres perderte ninguno. El local: increíble. Decorado con mucho gusto (aunque para gustos, los colores) lo cierto es que la característica que más destacaría es el ambiente acogedor que te envuelve. Consigue que que estés tan a gusto, que no quieras marcharte. El servicio: inmejorable la atención de todo el personal de sala. Prestan una atención exquisita y calmada. Como dijo mi amiga, te tratan como si te conocieran y quisieran mimarte, pero con distancia y respeto. Muy atentos en todo momento. La comida: pues tendremos que volver para seguir degustando platos, porque no ponemos un pero a nada de lo que pedimos (croquetas, ensaladilla de marisco, queso frito con mermelada, chocos fritos, wok de presa, tarta de zanahoria y coulan) y eso desafía las leyes de la física. Sobrepasa el 10 con creces. Merece la pena, sin lugar a dudas.

Desayunos espectaculares, camareros muy atentos y simpáticos y comida de calidad muy elaborada. Desde febrero suelo ir a desayunar y cenar muchas veces allí y siempre me quedé muy satisfecho. El local es decorado con mucho gusto. José, el director, siempre está pendiente que los clientes se encuentran bien y además es muy agradable. Uno de mis restaurantes favoritos en Sevilla y sin duda el mejor de Triana.

Sitio increíble, una comida elaborada y un ambiente muy acogedor. Nuestro camarero Conrado un trato inigualable, tanto la presentación de los platos como su sabor de diez y una cocina fusión elegante... Volveremos sin dudarlo y eso que íbamos con niños de diversas edades. Comida para cualquier edad y gusto.

La experiencia fue bastante agradable. Pedimos: - Ensalada de tomate burrata y pesto: Una absoluta delicia, iba acompañada de un aceitito increíble, todo enlazaba espectacularmente, la recomendamos fuertemente. - Croquetas variadas: Aquí tenemos un sabor agridulce, las de chorizo eran una absoluta delicia, muy jugosas y nada pesadas, sabor sutil pero presente a chorizo, muy recomendables, sin embargo venían acompañadas de croquetas de marisco, las cuales parecían refritas, la cortesía muy muy dura, plástica, no se podían pinchar, sabor correcto pero extremadamente aceitosas. -Carrillera: Sabor muy potente, carne jugosa y un puré de base muy cremoso, recomendable. - Coulant de chocolate: Muy correcto, venía acompañado de helado y una harina de galleta en base, estaba muy bueno, nada sobrenatural pero muy agradable. Además fuimos con el descuento de El Tenedor y salió genial de precio, unos 16€ por persona.