Sinergia Soul Kitchen

El local dispone de las mesas justas para ofrecer un servicio de calidad. La noche que fuimos a cenar ofrecía una carta (provisional) relativamente corta pero con platos sugerentes; nos sirvió el propio cocinero lo que me favilitó el poder conocerle personalmente. Los tres platos que compartimos estaban a la altura de lo excelente: tomate aderezado con trozos de conejo escabechado; unos callos (preparados de forma muy particular) que se hizo comer y finalmente lomo de vaca a la brasa acompañado de un ligera salsa y patatas fritas con su piel. El postre... un coulant de chocolate cubierto de helado de dulce de leche. El verdejo que regó las viandas estaba a la temperatura adecuada para ofrevcer frescor pero liberar sus aromas y sabor. Recomiendo este restaurante al que sin duda volveremos y deseamos que la ilusión del cocinero solidifique en un buen futuro.

Me he enamorado de este restaurante. Sin duda un gran acierto venir a Sinergia, todo estaba riquísimo, platos perfectamente presentados y sobretodo sabrosos. La ensaladilla, tosta de perdiz, cachopo y burrata espectaculares, pero LO MEJOR shiitakes con huevo poche. Un espectáculo para el paladar. Además la plantilla fue espectacular. Gracias por todo, volveremos!

Sitio con mucho encanto, y que ha sido remodelado en época reciente. Toda la carta es formidable, siendo el shitake y el pescado a la brasa lo que más nos gustó. Diversidad en los tipos de vinos. A los mandos de la cocina un excelente chef. Siempre que vamos es una apuesta segura. Altamente recomendable.

Ambiente ameno. Restaurante sencillo, agradable, sin pretensiones eso le da 5 estrellas ✨ así como que la carta sea pequeña. Dicho lo bueno.... pequeños detalles que no me gustaron:pedí agua, la quería natural. Únicamente tenían botellas de 1L. La pusieron sobre el mantel estando sucio el asiento de la botella, eso hizo que se manchase el mantel. Me cobraron la botella de 1L. Siendo una cuenta generosa, ten el detalle de cobrar lo que se pide y no tenéis. La comida sencilla y de calidad. Cantidad pequeña, pero suficiente. Lo que me resultó muy caro fue la lasaña de verduras. No era lasaña ya que no llevaba pasta. Tenía demasiada becamel con trufa, quedando el sabor de los ingredientes enmascarado. La ensaladilla muy bien hecha, equilibrio de sabores. El escabeche de perdiz muy acertado. La carrillada exquisita. El frito del pescado perfecto. Postre perfecto. La carta de vino se la han hecho muy estudiada . Volveré para probar más platos.

Buenísima elección, he ido un par de veces y ambas me ha encantado. El restaurante es bonito y muy acogedor, no tiene muchas mesas por lo que el ambiente es muy agradable. El servicio impecable, una de las veces incluso nos explicó el menú el Chef. La comida muy buena, platos tradicionales pero hechos de una forma elaborada y moderna ¡y buenas raciones! Las croquetas espectaculares, las setas shitake súper originales, el arroz con perdiz muy bueno pero sin duda me quedo con la carne, segun nos dijeron en el restaurante tienen parrilla de carbón que da un sabor y un punto a la carne buenísimo. Ah! Y hay que dejar un poco de hueco para el postre, la tarta de queso es una locura Lo recomiendo al 100%