Sevilla D.f.

Plato de lagrimitas de pollo, tapa de solomillo al whisky y tapa de papas bravas. Las lagrimitas espectaculares, muy crujientito el rebozado y por dentro están maceradas en aliño de pinchito. Una pena la salsa de miel y mostaza que creo que es demasiado miel o tiene aceite que le quita mucho sabor. La tapa de bravas, para el precio bien aunque las patatas así tipo panaderas, para ese plato no me convence nada. Si no fuera por lo demás le daría 4 estrellas, aunque la salsa roja que será tomate frito con pimentón y algo picante junto a una especie de crema agria, estaba bastante bien. Pero repito, no es el tipo de corte que se debe usar para unas bravas. La tapa de solomillo al whiskey decente, sin más, no me sorprendió para bien ni para mal. En plena plaza de la Alfalfa con buena ambientación y un servicio muy atento, muy cuidados los detalles y la decoración.

Restaurante en el casco antiguo (Plaza de la Alfalfa) con comida algo diferente del resto de restaurantes típicos /turísticos de Sevilla. Tiene una terraza agradable. Personal atento y rápido. A destacar el salmorejo (de remolacha!) y las croquetas de gambas (con puro sabor a gamba, muy muy sabrosas). Precios un pelín más elevados de la media, pero es compresible por su localización y que sea comida algo más diferente. Conclusión: recomendable