Suma

Restaurante con ubicación excelente, en pleno casco histórico y reformado con gusto: aprovechando la arquitectura antigua de los bajos del edificio. La carta no es amplia (algo que yo siempre agradezco), pero bien escogida: producto de proximidad al que en varias recetas se le da un toque "exótico" a la hora de elaborarlo. Precios muy contenidos para la ubicación y la calidad/servicio del local. Personalmente me gustaron mucho el Ceviche de lubina y la Raya estilo oriental.

Un placer pasar a comer en este restaurante. Todo a estado riquisimo. Las zamburiñas esta de lujo, de aperitivo nos ha puesto unos mejillones buenísimos y el arroz negro con choco buenísimo. El trato del camarero a sido correcto, sin duda repetiremos otra vez. Dela arroz no subimos fotos por que nos lo hemos comido sin darnos cuenta.

La comida del lugar fue exquisita y el camarero que nos atendió fue super atento, fue el 26 de agosto - jueves - al mediodía 😉. Nos recomendó un vino que sin duda valió la pena, además tenían problemas en cocina y supo gestionar muy bien la situación y atender a cada cliente cuando podía hacerlo. Impecable trato. Tanto yo como mi pareja nos llevamos un recuerdo muy bonito de Santiago y de esta comida. Super recomendable !

Lo encontramos de casualidad, y bendita casualidad! Nos encanta comer y la buena comida y sin duda este es un sitio que hace honor a ella, dejaos aconsejar por Suso y las sugerencias fuera de carta porque de verdad que merece la pena, zamburiñas de la ria espectaculares y un arroz con langosta que quita el hipo! Sin duda una parada obligatoria para reponer fuerzas en la bella Santiago. Muchas gracias Suso por tus consejos y tu atención, y desde luego que nos fuimos felices y habiendo disfrutado de una calidad humana y gastronómica única.

Espectacular! Íbamos buscando un sitio para comer de manera improvisada un domingo de agosto y tras intentar en varios, entramos en Suma casi por casualidad. Y menuda casualidad! El trato que recibimos fue impecable y la comida de 10. Pedimos gyozas de langostinos (la salsa increíble) y sardinas ahumadas sobre una tosta de queso fundido (que maravilla) de entrantes y luego un ceviche de vieiras y unas carrilleras para cada uno. No sabría decir que estaba mejor. De postre una tarta de queso casera buenísima. Temíamos quedarnos con algo de hambre por el concepto “moderno” del restaurante, pero para nada (y somos de buen comer). Volveremos seguro la próxima vez que visitemos Santiago.

Estuvimos hace dos noches y encontramos este maravilloso rincón de la comida por pura casualidad, pero no hay mejor experiencia gastronómica que la que disfrutamos allí. La atención fue inmejorable, con consejos y recomendaciones súper acertados. Comimos pulpo, vieiras y carrilleras estofadas y los postres los dejamos a la elección de la persona que nos atendió...no he probado mejor torrija en mi vida y la mousse, bueno, no hay palabras para describir algo tan delicioso. Lugar recomendado 100%, volveremos seguro, un viaje cortito desde Granada.

Excelente.! Un restaurante diferente a los demás en la Rúa do Franco. La sardina ahumada está exquisita!.la presentación muy cuidada. Zamburiñas con pil pil de Wakame y costillar de angus a baja temperatura. Son platos que todo el que vaya debería probar! Sin olvidarnos del postre.. Las torrijas están buenísimas!