Ambrasa

Buena comida, buen ambiente y buen servicio. Todo lo que se puede pedir para comer bien. El precio es algo elevado, pero hoy en día en dónde no lo es? Sin duda una opción, no para cada finde, pero sí para repetir varias veces. Los entrantes para mi gusto, lo que menos he disfratdo. Croquetas grandes, estaban buenas, buñuelos aceptables, buen número pero algo insulsos. Ensalada de tomate con cebolla, OK, no se puede pedir gran cosa de este plato... Huevos rotos, sin duda la mejor opción de primero, pero los he comido mejores. Luego de principales, el pollo enorme y buenísimo, el pescado con escalivada muy acertado, los calamares estaban muy buenos, el bistec también y la butifarra a la brasa también. Helados de postre originales y con sabor potente. Sin duda repetiremos, además nos trajeron una tapita de regalo, la copa de cava y los chupitos. Muy atentos y simpáticos.

Lugar tranquilo, sin aglomeraciones, limpio, luminoso y con amplias vistas. El servicio se esfuerza para que te encuentres cómodo. Desde cocina y mediante una pizarra dan a conocer especialidades del día INDICANDO LOS PRECIOS, (cosa que Cuando otros dicen: "y fuera de carta tenemos ... ... siempre acaba en una trampa). Los platos elaborados con con cariño, el servicio muy agradable y la dirección muy interesada en conocer el nivel de satisfacción. No hacen turnos y por tanto se va más relajado en todos los sentidos. Un 10