Pintxos muy ricos. Las orejas fueron asombrosos.
Álvaro de las Heras y López-Yuste
+5
Aunque con poca luz es un sitio muy acogedor y muy bien decorado. Se compone de mesas largas y bancas para comer o cenar muy bien ambientado como taberna de época y con su cueva. Una carta basada en productos de temporada aunque algo escasa, pero su oferta gastronómica es suficiente para satisfacer cualquier estómago. Su pescado a la brasa muy bueno y su carne también a la brasa es espectacular.
Tiene un vino de fabricación propia que se debe al menos probar.
Buen lugar para un banquete de celebración. Recomendable.
El bar es enano, y como de otra época y otra provincia( a mi me encanta) se podría decir "pintoresco"
Tiene restaurante de menú del día.
La terraza para tomar algo es muy tranquila al estar en una miniplaza y no en una calle
Los marianos los preparan bien.
Y si os gustan los champis, tienen raciones de champis a la plancha muy muy muy buenos, no os los perdáis.
De precio andan MUY bien.
Situado en uno de los edificios más antiguos de la parte vieja donostiarra que se salvó del famoso incendio de 1813. Actualmente está regentado por la misma familia que lo fundó en 1960.Ofrece un excelente y variado menú que incluye carnes y pescados y una amplia carta de vinos. Visita recomendada.
La verdad que está muy bien es un sitio muy acogedor suelo ir cuando al Madrid le ganan. Me la recomendaron mis amigos Unai y cortijo cuando el Madrid ganó 4 champions en 5 años y la verdad que está muy bien, cuando el Madrid es humillado es un sitio bastante recomendable.
En uno de los únicos edificios de la parte vieja que no fue destruido por el fuego de los ingleses el 31 de agosto de 1913, además del encanto del local, está el sabor de sus platos tradicionales como los champis, los pinchos morunos, de riñones y una variedad de los clásicos de siempre.
Muy recomendable! Un gran producto y materia prima, todo riquísimo Calidad insuperable. El servicio muy atento y amable. Ubicación buenísima, en plena casco antiguo. A tener en cuenta es la casa más antigua de San Sebastián.
Deseando repetir!!!
Un lugar entrañable aunque le queda poco, ya que el próximo miércoles lo cierran. Una verdadera pena. Ojalá los nuevos dueños lo mantuvieran tan entrañable como es y no lo convirtieran en otra cosa. Una verdadera pena para los donostiarras y turistas. Lugar con casta
Muy rica la comida. Muy buena atención y buena calidad, no excesivamente abundante. He comido pagando más y bastante peor. No es barato pero tenes asegurado algo rico. Muy amables.
Este es uno de los pocos bares de pinchos que queda en el casco viejo. Y en breve lo cierran. Champis a la plancha como siempre, pulpo, gildas, piparras y restaurante añejo. Aprovecha mientras dure.
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