Kaxilda

La propuesta de rte, cafetería y librería es atractiva El sitio es agradable. Está un poco escondido, dado que está por la parte de atrás de una calle muy concurrida. Un poco limitado el espacio para comedor pero, dispone de varias mesas más en terraza con sombrillas No he probado la comida. Solo he tomado café y he curioseado en la librería. Es una librería que está claramente orientada hacia la izquierda. No lo digo como defecto, es una mera descripción.

Más que recomendable si vas a Donosti,ciudad especialmente bonita y “cara”. Por eso recomiendo comer en Kaxilda, nosotros reservamos en terraza (tienen un suplemento de 50 céntimos por persona) que merece la pena pagar. Obligatorio pedir la ensalada de burrata con pistachos y aliño de mango y tomate, increíble. Después seguimos con unos hongos al horno y yemas trufadas (espectacular), Koftas fritas de lentejas rojas y verduras con salsa tzatziki, y wok de arroz rojo salteado con verduras y salsa teriyaki. Estaba todo mundial, aconsejo que pidáis medias raciones porque no sabía que las cantidades eran tan generosas, nos tuvimos que llevar casi entero el arroz de lo llenos que estábamos, no pedimos postre pero si os tengo que recomendar uno que probé en otro sitio es la tarta vegana de zanahoria de “alkhemi laboratory” con caviar de maracuyá, es de un obrador local que hay en Donosti y está muy muy bueno. La atención del personal fue impecable, rápidos y atentos, no me dio tiempo a ver con atención el local interior pero pude ver que al fondo tenían como una librería pequeña muy acogedora, en general el lugar es bonito y además está al lado del tren (easo) para los que van en transporte público.