Humo

En mi opinión es una de las mejores pizzerias de Donostia. Sus platos principales estan basados en pizzas napolitanas, en el que el pan es finito y blando en el centro y con bordes más gorditos y crujientes. Además la masa estaba hecha con masa madre. En nuestro caso nos saltamos el entrante y fuimos directos a las pizzas. Pedimos una pizza de "jamón y queso" muy exquisita que tenia el jamón york cortado en lonchas bastante gordas que le daban un toque diferente, con un tomate casero riquísimo. También estaba muy buena la pizza de verduras que tenia unas cuantas verduras como calabacín, calabaza, cebolla, cebollino y otras verduras cortadas muy finamente que le daban un toque crujiente a la pizza. La yema de huevo no se notaba demasiado. También pedimos una tarta de queso de postre con una bola de helado de frambuesa que estaban espectaculares de verdad. Una de las mejores tartas de queso que he probado. Y el café estaba buenisimo. La pizzeria es bastante grande, caerán alrededor de 40 personas o más y es muy bonita. Se puede ver en el fondo a los cocineros cocinando los diferentes platos y el horno de piedra bien grande. El restaurante tiene un estilo particular muy bonito y creo que en invierno es uno de esos sitios en los que se tiene que estar super calentitos cob el horno de piedra. Creo que también tienen algunas mesas en la terraza, pero cuando fuimos estaba lloviendo y no estaban puestas. En cuanto al servicio fueron muy amables. Uno de los camareros explicaba todo muy claramente y con mucha educación los paltos del día, las elaboraciones y las diferentes elecciones que podíamos hacer. Todos un encanto.

Primero mentalizaros de que no os vais a encontrar las clásicas pizzas; y eso nos paso a nosotr@s, altas expectativas que se nos convirtieron en seudo “decepción”. Pero bueno eso es algo personal. Pizzas ricas, diferentes, elaboradas y un precio adecuado para su tamaño. Una carta de pizzas no lo suficiente amplia para ser una pizzería como tal, pero a cambio ofrecen otros productos. Atención muy correcta y servicial. Por lo menos recomendable conocer el local y producto.

Las pizzas son un arte en este lugar. El ambiente más pizzero no puede ser y además buena distribución y el servicio muy amable y atento; siempre con una sonrisa. Probamos el vino que nos recomendaron “Rayos Uva” Rioja y genial. Sugiero que mejoréis las jarras de agua agrandando su tamaño ligeramente ya que se quedan muy pequeñas y siempre que vamos nos quedamos sin agua enseguida. También nos gustaría ver los precios de las pizzas al pedir ya que no están marcadas. Esto seguramente es porque es más caro que la media. Por lo demás genial!

Pedimos unos entrantes, una pizza por persona y un postre por persona! La verdad que todo estaba buenísimo! Pizzas exquisitas y diferentes! Me llamaron la atención los postres, tarta de queso, tiramisú y tarta de chocolate! No podría elegir una! Por poner una pega, pedimos agua del grifo y no nos sacaron, quiero pensar que se le pasó a la camarera y no se acordó! A pesar de esto, muy agradables!!

Las pizzas estan buenas pero no son las clasicas pizzas, cosa que se agradece pero no a todo el mundo le gustan. Probamos varias y todas muy buenas. La burrta y focaccia tambien rica. Los postres tambien buenos. Buen servicio. Mejor reservar ya que esta a tope. El unico pero es que si hay mucha gente hay bastante ruido y a veces no te oyes. Volveremos!

Calidad de pizzas buena. Si quieres probar pizzas con diferentes ingredientes que se escapan a los habituales es un buen sitio. La masa elástica pero muy fina lo que provoca que sea difícil de comer al caerse los ingredientes. Pedimos la pizza número 7 y 10. Precio un poco elevado pero porque la materia prima es buena. En cuanto al postre la tarta de queso estaba espectacular y el tiramisú si te gusta el sabor a café el bizcocho está muy empapado y sientes una explosión de café al probarlo. Precio 41 euros por los cuatro platos. Puedes ver si quieres todo el proceso de elaboración al tener la cocina visible.