Un comedor muy agradable con aire acondicionado, aunque también se está bien en la terraza. Ofrecen un buen producto con una cuidada presentación. Los camareros muy amables, especialmente Javi que es muy profesional y hace buenas recomendaciones.
Ana Maria Gomez Gonzalez
+5
La atención por parte de los camareros de lujo y la Comida muy buena!lo recomiendo 100%,Volveremos pronto, muchas gracias
Javier eres un fenómeno.. atento y servicial. ... la comida inmejorable . Y los postres. De vicio
Paola R (TheRamosTeam)
+5
Muy buen sitio. La comida estaba muy rica y el trato fue muy bueno. Además tenían una carta bastante amplia con muchas opciones, aunque había pocos platos vegetarianos.
Pagamos 15€ por cabeza. Bastante económico.
Buen sitio para comer. Sobre todo el parque infantil arriba, es una pasada para los más peques de casa. Los mayores comen de fábula, calidad, cantidad y servicio. Siempre vigilando el parque de bolas desde donde estes. Bien ambientado, como nunca visto.
Somos asiduos allí.
Un saludo
Los bocadillos están brutales 🤤🤤 fuimos a almorzar y salimos encantadisimos lo único que es algo caro!! 14euros 2 bocatas y 2 birras la verdad pero la zona al ser girilandia pues suben precios es normal 🙌🏻🙌🏻
Restaurante con amplio salón y terraza.
Menú del día con platos bien elaborados (no excesivamente abundantes), adecuada cantidad de platos a elegir.
El servicio es correcto y el local agradable, con buena climatización.
La relación de calidad precio destacable
Buen lugar, elegante y acogedor, con diferentes ambientes y parque de bolas en planta superior con ascensor.
Todo bien acondicionado y seguro para los peques, dónde pasar un buen rato mientras ellos también disfrutan👌
Hemos comido menú diario y qué maravilla!!!
Otra cosa que nos encantó es que pudimos comer con nuestro perro en la terraza y además tienen menú para mascotas muy económico y bueno!
El camarero que nos atendió se llama José y se portó genial.
100% recomendable.
Una cena en solitario
En mi más reciente experiencia gastronómica, decidí aventurarme en una cena en solitario para disfrutar de un encuentro con la comida en su máxima expresión. Al visitar el restaurante, me encontré con un ambiente acogedor y sofisticado, perfecto para aquellos que buscan un momento de ambiente y disfrute culinario.
El servicio impecable y atento desde el momento en que me acople a la barra. El "jefe" me hizo sentir bienvenido y valorado como comensal. El personal estuvo constantemente presente, brindando recomendaciones y explicaciones detalladas sobre cada platillo y maridaje.
Empecé la velada con una selección de aperitivos exquisitos, presentados con esmero y atención al detalle. La combinación de sabores frescos y texturas sorprendentes ofreció un encuentro culinario que despertó todos mis sentidos. Desde el primer bocado, comprendí que me encontraba en un lugar donde los chefs tienen un dominio completo de su arte.
El plato principal, sin lugar a dudas, fue el punto culminante de la noche. La presentación fue una obra de arte en sí misma, cada elemento colocado estratégicamente para crear una armonía visual que sólo se superó al probar los sabores que se desplegaron en mi paladar. Cada ingrediente, en su punto perfecto de cocción y sazonado con maestría, se combinaba en un baile sinfónico de delicadeza y sabor.
La carta de vinos presentó una selección extensa y cuidadosamente curada, con opciones tanto clásicas como vinos de producciones más pequeñas y menos conocidas, pero "me dejé aconsjar". A través del conocimiento y la pasión transmitidos por el "jefe", pude disfrutar de maridajes excepcionales que realzaron cada plato y complementaron los sabores de manera sublime.
El postre fue el colofón de la experiencia culinaria. Una creación ingeniosa que combinaba ingredientes inusuales de una manera impecable. Cada cucharada ofrecía una explosión de sabores y texturas, llevándome a un viaje de dulzura y deleite.
En resumen, mi cena en "solitario, no me sentí para nada solo", fue una experiencia gastronómica excepcional de principio a fin. Cada plato, desde los aperitivos hasta los postres, fue un testimonio del talento y la dedicación de los chefs y el personal del restaurante. El ambiente elegante y el servicio impecable completaron la experiencia, creando un momento íntimo y memorable.
Recomiendo encarecidamente a aquellos que buscan una experiencia culinaria singular y relajante, que se aventuren en una cena en solitario o en buena compañía, este establecimiento. No solo quedarán satisfechos con una comida de calidad superior, sino que también saborearán un momento incomparable y memorable.
An error has occurred! Please try again in a few minutes