La Pinta Beer Factory

La verdad es que está todo genial. La comida, riquísima y el servicio excelente. incluso tienen cuencos para que los perros puedan beber agua si vas con uno (no en todos los sitios pasa esto) pero le doy un cuatro porque no tienen nada para ahuyentar a las avispas, ¡y hay muchísimas! no comes a gusto por ello. Recomiendo unas velas, o cera o la misma planta de citronela. Es barato y ahuyenta a todo, es el único fallo que le doy

Cerveza de barril muy rica y bien tirada, algo cara y por eso no le doy 5 estrellas (2,30€ media pinta, equivalente a una caña). Comida rica también para picotear algo rápido. Raciones abundantes. Personal atento y muy amable. Local muy agradable, bonito, tranquilo y con distancia COVID. Recomiendo ir si estás por la zona.

Menú del día rico y abundante, tanto que la primera vez que fuimos tuvimos que pedir los segundos platos y el postre para llevar a casa, ya que además del poké de salmón y unas braviolis buenísimas, nos sacaron un guacamole para probar gratis y ya no podíamos más. Cuando llegamos a casa por la noche vimos que, por error, no nos habían incluido los postres. Después de intercambiar una serie de mensajes con ellos por redes sociales, la nueva relaciones públicas del local, Lorena, de forma muy profesional, resolutiva y generosa, nos invitó a comer otro día para resarcirnos por el error y toda la serie de malentendidos posteriores. En esta segunda ocasión, nos encantaron los huevos rotos y los tacos cochinita. Su propia cerveza artesana también nos gustó mucho, así que repetiremos, sin duda. El local es bonito y agradable por dentro y tiene una terraza exterior muy chula, que promete ser un verdadero planazo para el verano :)