Volea

Llevábamos tiempo queriendo ir por lo bien que lo ponen. El restaurante es agradable, con gusto, con las máximas comodidades. La mesa perfectamente presentada (difícil hoy en día). Las croquetas y chopitos buenos. Hemos pedido arroz de sepia y gamba roja. Estaba un pelín duro pero muy sabroso. Nos ha gustado mucho.

El local tiene un aspecto renovado y fresco. Todo limpio y cuidando hasta el último detalle. El servicio profesional y atento. En cuanto a la comida, se trata en todo momento de un continuo juego con los sabores y las texturas. El arroz, su especialidad, con muchísimo sabor debido a unos caldos y bases bien elaboradas y el grano en su punto perfecto. No obstante, el jefe de cocina salió a servir el plato y posteriormente a preguntar por la impresión. La tarta de queso sabe a queso, un punto a favor. Y el café está muy bien para terminar una velada inolvidable. Por sacar una pega, el tinto que pedí estaba un tanto frío, pero nada que llegara a molestar. 100% recomendable..

Lugar ideal para ir a jugar al pádel y quedarse a tomar unas cervecitas o comer con los amigos! Fuimos un grupo grande con niños incluidos y la verdad estuvimos muy bien. Los entrantes a compartir muy buenos y los arroces estupendos! Recomiendo probar el arroz de pichón y butifarra negra. La elegimos por descarte porque no quedaba ya el otro arroz que queríamos y a final fue el que más nos gustó!!! 😛 Además, hay animadores para los más peques, así que en cuanto terminan de comer se van a jugar con otros niños bajo su cuidado, todo un detalle por parte del centro. El único pero, que el precio es un poco elevado para la comida que ofrecen, por lo demás todo muy bien.

Club de padel con restaurante muy acogedor. Habíamos escuchado que es famoso por hacer un muy buen arroz y nos acercamos a probarlo. El servicio fue bueno, los camareros amables. Comimos: Ensalada de burrata con bonito ahumado y cebolla caramelizada: ni rastro de la cebolla caramelizada y el bonito nos pareció muy seco. La burrata fresca muy buena con la rucula. Arroz de pichón y butifarra negra: muy bueno. Nos gustó mucho el socarrat y la cantidad para 2 personas muy buena. Único pero, el pichón estaba muy seco. Tarta de chocolate cremosa: Muy buen postre con helado de yogur que combinaba muy bien y bañado de chocolate por el camarero. Top No le doy las 5⭐️ por el pichón que estaba muy seco y la ensalada que fue flojita. El precio, tirando a caro. Valoración: 7,5/10 Precio x persona: 40€

Fuimos a probar los arroces, y el meloso con chipirones y cigalas estaba muy bueno (aunque los chipirones no se dejaron ver mucho). De entrante tomamos bacalao rebozado, que también estaba bueno, en su punto. El servicio, muy atento y el ambiente muy agradable. El precio es más bien alto teniendo en cuenta el tamaño de las raciones.

Un sitio súper agradable para comer o picar algo. De comer los arroces son muy ricos con un punto perfecto del arroz. De picoteo destacar el mollete de pastrami.....unos de los más ricos que he comido nunca incluido NYC !!!!! Que pan más rico !!!! El servicio de 10 ! Uno de esos sitios donde da gusto ir por la comida, el ambiente y el ya comentado servicio, algo difícil de poder decir últimamente en Madrid. Mil enhorabuenas por hacer las cosas tan bien.