Sitio elegante y cuidado. Los raviolis eran de espinaca y estaban muy buenos, los espaguetis también, quizás echamos en falta más presencia de la gamba. Muy bueno todo, nos invitaron a un chupito.
Trato inmejorable y comida espectacular en lugar muy acogedor y con mucho carácter. El dueño muy atento y gran conocedor de la extensa carta de vinos.
Repetiremos :)
Local pequeño y agradable. La carta de comida es pequeña, pero tienen también platos del día. Tienen mucha variedad de vinos, si no sabes mucho de vinos te aconsejan cual escoger. Lo lleva una familia italiana muy amables de trato. La decoración es como si estuvieses en un salón de una casa. El precio es alrededor de unos 20€/pers.
Es de los mejores italianos que he probado en mucho tiempo, además con opciones de maridaje y con una relación calidad precio excepcional. El servicio excelente pero la comida exactamente como la haría la nonna. 100% recomendable.
Lugar super hogareño. Estás como en tu casa, el trato es genial. Son una pareja encantadora y la comida estaba buenísima. Muchísima variedad de vinos.
![5]( "Recensione")
Nos gusto tanto que tuvimos que volver antes de irnos de Mallorca. El lugar es super bonito, unico, la comida es deliciciosa, la recomendacion de vinos optima y las personas a su cargo muy amables. Llegamos a este pueblo porque tiene una playa para perros. Tras la playa paseamos un poco por el puerto y algunas callecitas buscando donde comer, y encontramos los restaurantes tipicos de balneario, algunos super ruidosos. La verdad Loqueria nos parecio un oasis, por su originalidad y calma. Comer al son de la musica clasica a bajo volumen me parece de lo mas relajante. La espera es perfecta, uno va a relajarse y cenar en paz y en este restaurante realmente lo entienden. Hemos probado los ravioles de ricota y espinaca y me han parecido deliciosos, tanto que los tome las 2 veces. Tambien el bacalao, que es una delicatessen, las anchoas con patatas, el atun rojo, todo con unas remendaciones de vino perfectas. La atencion esta en cada detalle, los vasos hechos por un discipulo de la escuela de Murano, livianos y bonitos, los platillos de ceramica que traen un pan que no se puede dejar de comer, y la decoracion del sitio, que te entretiene mientras esperas la comida. Si estas buscando algo rapido y de porciones exageradas, este no es tu sitio, si queires un momento para comer saboreando la comida y apreciar su presentacion, te lo recomiendo.
Especialmente acogedor, muy agradable ideal para pasar el rato con familia, amigos o pareja.
Trato excepcional comida riquísima postres buenísimos y amplia carta de vinos muy elaborados!
Un 11 de 10!
Exquisito lugar para relajarse y disfrutar de un ambiente acogedor muy cuidado en detalle y muy diferente a todos los locales de puerto pollensa. El trato es muy cordial y cálido te hacen sentir muy comodo en ese salón tán bonito lleno de objetos y música clasica. La foccacia es espectacular y si pides café viene acompañado con un trocito de tarta casera. 🌞☺
Que lindo ambiente, muy acogedor. Me sentí en la casa de la pareja que lo maneja. Entre la decoración, con muebles antiguo, diferentes mesas y la atención de ambos. La comida es esquisita. Nosotros compartimos la burrata, los ñoquis verdes y el tiramisú. Uno más rico que el otro. La vajilla hecha a mano y de diferentes formas también es un detalle muy lindo. Los precios muy razonables por la calidad y el detalle de preparación.
Un lugar muy especial, gran variedad de vinos orgánicos, atención exquisita por parte de sus dueños italianos. Muy recomendable local muy cerca de la plaza de puerto de Pollença
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