Bar Diva

Ha sido una estancia magnífica, hotel tranquilo y con muchos servicios alrededor, a un paso de Palma con el bus sin necesidad de coger el coche. Instalaciones nuevas y con personal muy amable, en especial dar las gracias a Cristina que nada más llegar nos aconsejó y guió para aprovechar el tiempo al máximo, además de hacernos sentir como en casa. Gracias por todo, seguro que repetiremos.

La atención en recepción da gusto. Los apartamentos un poco "retro", es decir, con decoración algo antigua. El aire acondicionado en nuestra habitación nunca funcionó (abríamos la ventana que aun hacía fresco en Mallorca) y escuchabamos todos los portazos y gritos de los turistas británicos de la habitación contigua, sin mencionar que sus amigos tocaban constantemente en nuestra puerta porque se equivocaban.

Ha sido una buena decisión pasar una semana en sus apartamentos, todo muy limpio y cuidado, no es muy complicado aparcar por la zona y si se dispone de coche, no está lejos para realizar excursiones como visitar la illa de dragonera o ir a calas. El personal muy amable en especial Mónica, la animadora, que es una gran profesional y se nota que le gusta su trabajo. Es un sitio muy tranquilo y recomendable.