Restaurante Esnalar

Restaurante muy elegante y buen servicio, la comida nos encantó. Para empezar, la tortilla de kokotxas estaba muy buena y jugosa, el codillo espectacular y el lomo madurado de frisona muy bueno. De postre, la torrija es imprescindible. El souflé de chocolate y el arroz con leche muy ricos. Puntuaciones: •Tortilla de kokotxas. [8/10] •Codillo lacado. [9.5/10] •Lomo madurado de frisona. [8/10] •Torrija. [10/10] •Souflé de chocolate. [7.5/10] •Arroz con leche. [7.5/10]

Nos encantó todo! Pedimos el menú degustación de 7 platos ( 3 entrantes, 2 principales y 2 postres) por persona, y todo espectacular...desde la presentación hasta la mezcla de sabores y el cocinado...la cantidad estupenda para una cena, y el vino riquísimo a falta de probar el maridaje que te ofrecen junto a la degustación ( tienen gran variedad de botellas) Luis y Pelayo, que están al frente muy profesionales, un gran servicio! Repetiremos!.;)

Me ha gustado mucho. Una oferta gastronómica diferente y completa. Sabor, presentación y originalidad en igual proporción. Totalmente recomendable. No es barato, pero sales con la sensación de haber pagado el precio adecuado para lo que has comido. Enhorabuena a los chefs por su cocina y al personal de sala por su excelente atención.

Local acogedor y bien decorado en el centro de Oviedo. Pudimos comer un día complicado de gente sin reserva previa, pero el local no es muy grande, así que mejor reservar. Servicio amable y profesional. La comida en general muy bien. Gran materia prima y un buen nivel en la cocina. Las raciones en algún caso algo justas,. Precio de acuerdo a la calidad. La carta de vinos estaba bastante bien, con muchas referencias poco conocidas que permiten descubrir nuevos vinos.

Un absoluto descubrimiento este sitio. Vine recomendado por un familiar y la sorpresa ha sido tremendamente positiva. Lo primero que me llamó la atención fue el local, ya que hace unos años este sitio era un bar que frecuentaba mucho. El cambio que han hecho al interior es increíble. Decorado con una elegancia y un gusto exquisito. Genera un ambiente confortable y acogedor a la par que serio que te prepara para la experiencia. En segundo lugar el servicio. Nos atendió un chico del cual no recuerdo su nombre de una forma exquisita e impecable. Educadísimo y muy atento en todo momento desde entrar hasta marchar. No tuvimos ni problema para calentar un pequeño recipiente con comida que se había enfriado para mi hija. Una maravilla. Por último qué decir de la comida... un absoluto placer para los sentidos. Tomamos, entre otras cosas, un entrecot que nos fue presentado crudo antes de prepararse y que llegó en un punto perfecto. El resto de platos absolutamente exquisitos tanto en contenido como en continente (presentación) En resumen: un sitio de 10 al que volveré para intentar catar toda la carta (no muy extensa por cierto, lo cual es siempre bueno) ya que lo merece. Felicidades a todo el equipo de "El Esnalar" por haber creado un sitio tan maravilloso.

Nos encantó!! Conocimos este restaurante por las redes sociales, instagram, y por lo que publicaban teníamos muchas ganas de ir y probar esos platos de una vez!! Fuimos un domingo a la hora de la comida, local tranquilo, muy bien decorado, con música de ambiente y destacar sobre todo el trato de los dos camareros, muy simpáticos y atentos, a las copas, al pan.. a lo que necesitasemos. Sobre la comida probamos de todo un poco... Destaco sin ninguna duda el ceviche de vieira y el steak tartar, buenisimos los dos!! Además de esto nos pedimos un chuletón que viene acompañado con patatas y pimientos y bueno, que decir de esto, se nota la calidad del producto! Postres no nos dio tiempo (ni espacio, estabamos llenísimos) para probarlos pero iremos fijo a un brunch que están anunciando que van hacer y así los probamos todos de una!!! Por cierto! Vale la pena echar un ojo a la carta de bebidas y que te recomienden, tienen cervezas curiosas, en nuestro caso nos recomendaron una que se llama Súria, muy rica! Repetiremos sin ninguna duda, ya no solo por lo que nos gustó la comida si no por el trato recibido.