El Alto

Comimos el primer día de nuestro viaje a Asturias en este maravilloso restaurante, el trato, la calidad de la comida y su ambiente nos dejaron con tan buen sabor de boca que, por supuesto, teníamos que repetir y cerrar nuestro viaje despidiéndonos de Asturias aquí. Tenemos que decir que la comida es suprema, la fabada, el pote asturiano, el cachopín, el escalope al cabrales, el entrecot, el solomillo... los postres exquisitos, todo estaba sublime; pero lo mejor de todo, el trato exquisito de Jorge, el dueño; es una bellísima persona que está atento a todo detalle y ameniza cualquier comida. Nos quedamos enamorados de este lugar y de su gente, y por supuesto, de Jorge. Si buscas un sitio donde comer de categoría este es tu lugar, soy celiaca e intolerante a la lactosa (y para mí es algo complicado encontrar sitios en los que comer con tranquilidad) me adaptaron en todo momento el menú y lo mejor, estaba todo exquisito. Todo un acierto. Muchas gracias por todo, Jorge. Los sevillanos volveremos pronto y esperamos recibirte lo antes posible por nuestra tierra.

Paramos por recomendación de las reseñas en la vuelta de un viaje, fue todo un acierto!!,se come muy bien, yo pedí un caldo gallego y me pusieron un perol para que me fuera sirviendo y repitiendo, no pude comérmelo todo, y con el churrasco pasan la bandeja por si alguien quiere repetir. Lo recomiendo 100%.

Comimos en este restaurante en un fin de semana que estuvimos en Las Caldas , está relativamente cerca y merece el paseo(en coche). Comimos muy bien, como suele suceder en Asturias, es raro comer mal allí, suerte tienen los asturianos. Los guisos de cuchara muy ricos, bien cocinados, muy poco grasos a pesar de las viandas que los acompañan, el cachopo espectacular, rico rico, abundante, con patatas fritas caseras y dos salsas a elegir , Cabrales y champiñones, la gente del local amable y atenta. Todo genial Actualización: Pues siempre que nos acercamos a Las Caldas, siempre volvemos a comer aquí, siempre nos trataron genial y volvernos más veces

Un sitio muy interesante a visitar. Los camareros muy amables y la atención muy rápida. Recomendable reservar antes. Pedimos media ración de croquetas de jamón, aunque de tamaño justo estaban muy ricas y cremosas, se comían solas. Y el cachopo de la casa espectacular !! Bien cocinando, con un sabor contenido, suave, tampoco se perdía el sabor de la carne y del jamón, y una cantidad considerable para dos personas. Las patatas fritas caseras muy ricas también. La tarta de queso me gustó, sabor diferente y textura un poco más densa. El trozo que te ponen es bastante majo. Un 10 de sitio que repetiría para probar otros platos.