Mesón El Viso

Un 12 como sitio. Es pequeño y si quieres comer tienes que reservar antes, y merece la pena hacerlo. Vinimos por el cachopo recomendado por unos buenos amigos y que gran acierto, buenísimo. Las croquetas (caseras!) también riquísimas. Y si sois de dulce el arroz con leche tiene un toque especial que hace que esté más rico.

Un bar pequeño, de aspecto antiguo con manteles de papel pero… ¡menuda joya!, cenamos espléndidamente. El dueño, un auténtico profesional, muy majo y atento y, en cuanto a la comida, todo lo que pedimos estaba riquísimo. Creo que hacía tiempo que no comía unos calamares fritos tan buenos. El cachopo de cecina y la sartén de gambas, setas y jamón, también fabulosos. Para rematar, el precio. Inmejorable.

Es el chigre de toda la vida,parece viejo,pero todo muy limpio,hasta los baños relucen de limpios,cosa que llama la atención.Pero a lo que vamos,el señor que nos atendió,es un crack ,está a todo,pendiente de que no te falte nada,pero sin ser pesado ,ni cargante...la palabra que lo define es eficaz. La comida muy buena. No te pierdas sus sartenes. No pensaba comer postre,pero al final me decidí...si tarrito de tres chocolates,es espectacular,de otro mundo😋. Tres personas ,cenamos por un precio muy bueno y muy bien atendidos,desde luego,volveremos..hay que probar sus tortos y cachopos☺️

Holaa!! Esta familia canaria que estuvo la semana del 21 de julio tuvo la suerte de comer en este mesón maravilloso. Espectacular comida y atención de la familia q lo regenta....por supuesto en nuestra semana de estancia allí decidimos repetir en otra ocasión y aún mejor que la primera. Volveremos sin duda a Oviedo y al mesón. Besotes 😘