Casa Lobato

Restaurante imprescindible si visitas Oviedo. Con unas vistas estupendas, una comida muy elaborada y un servicio muy profesional y amable. Y realmente es un descanso agradable comer ahí. Es un sitio de un precio medio alto, pero no me pareció una locura. es totalmente accesible Por destacar un fallo en cuanto a la accesibilidad.: debería tener dos barras en una a cada lado. Pero solo tiene una, el baño adaptado no está muy estudiado.

Gran restaurante referente en Oviedo al que hacía años quería ir pero dado su éxito y calidad (y mi poca antelación) siempre lo encontraba completo, hasta que hace unos días por fin acudimos. El ambiente es muy acogedor, con unos cuadros preciosos y su personal no pudo ser más atento en todo momento, cambiando incluso las copas para el champagne si ya no estaban lo suficientemente frías, un gran detalle. Probamos como entrante para una mesa de cuatro, las croquetas que estaban muy buenas y las delicias de puerros y langostinos, obligatorio pedirlas. Como principales, solomillo al foie con setas, de los más buenos que he probado, siendo además una ración muy abundante. El entrecote con patatas, punto perfecto; la lubina al roquefort, sin eres amante del queso, es la salsa perfecta y el medallón de pixin negro con salsa de oricios, que pidió otro comensal y que será mi próximo plato porque estaba espectacular. Acompañado de una botella de bollinguer y su delicioso postre de esponjoso caliente chocolate junto con el helado de vainilla de tahití, el mejor que he probado en mi vida. Una auténtica experiencia para todos los sentidos, gracias.

No se como no pude haber venido antes. Restaurante elegante, enfocado sobre todo para eventos. Terraza cuidada y tranquila. Aparcamiento amplio. Hemos ido a celebrar un cumpleaños y hemos acertado. Calidad, dedicación en cada plato, sabores únicos y un servicio de 10. Precio elevado, pero merece la pena. La comida es abundante, los postres son son su mejor secreto y el café exquisito. Volveremos con más amantes de la comida.

La experiencia increíble. El lugar no solo es bueno por la comida sino por el espacio y las vistas que tiene. Cenamos de entrante: embutido , delicias de puerro con marisco (mi favorito) , sopa de marisco, de primero el solomillo, inmejorable!! El postre lo describiria como un banana pie. Base de banana con merengue por encima acompañado de helado de banana. Volveré siempre que pueda, lo recomiendo muchísimo ! Probablemente uno de los mejores lugares de Oviedo

Un local que lleva funcionando desde 1898 y es la cuarta generación. El trato del personal es excelente. La comida, mezclan lo tradicional con la innovación. Todo lo que se pidió estaba muy bueno con una calidad excelente y un precio acorde al lugar en dónde te encuentras. Merece la pena para darse un buen homenaje. Recomiendo probar las anchoas ( elaboración propia) y el lechazo asado aunque sin desmerecer todo lo demás.