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Restaurante Museo Tenería - Ocaña - Álbum de fotos

Pepe, el dueño, nos recibió en su casa, con trato cercano y amable , explicando la carta y cada uno de sus platos. Ha sido todo un placer comer allí por el trato, la comida y el servicio. A resaltar el pato, las alcachofas y las orejas, pero no quedan atrás las croquetas que se comió mi peque. Y com
Toda una experiencia!!! Pepe te explica sus platos como si hablara de sus hijos y te transmite toda la pasión que pone en ello. Yo personalmente agradecería menos adornos en los platos, no les hace falta.
Cambiamos de plan a última hora de la tarde y encontramos este restaurante a veinte kilómetros de nuestra posición. La acogida fue buenísima. Nos recibió la camarera y después el dueño nos presentó la carta y nos recomendó algunos platos. El lugar, la acogida, la atención y la comida de diez. Los ba
El Restaurante Museo Teneria Espetacular merece una estrella Michelín,el Chef Pepe maravilhoso las manitas no perde en nada con au Pie de Cochon en París, el Pato a la Mandarina igual de rico,todo perfecto
Todo increíble, comida y servicio. Las alcachofas (y eso que no soy de verduras pero es que tiene un sabor único), el pato, las croquetas, la carne… Imposible no repetir, un trato inmejorable al cliente.
Hemos tenido un velada de lo más agradable. Tuvimos que reservar bastante tarde para cenar después de una carrera y el trato ha sido exquisito. Los platos son presentados con mucha dedicación. El personal de 10. Muy recomendable la oreja entre otros platos. Desde luego un sitio para repetir y reco
Nos ha sorprendido la amable acogida , nos ha presentado los platos el chef, hemos comido alcachofas con foie,lingote de oreja y pato confitado con citricos,de postre mouse de queso d oveja con mango.Todos los platos muy elaborados y buenísimos.Para continuar el chef y propietario nos ha enseñado e
Restaurante acogedor , con un ambiente agradable ,con profesionales de 10. Sus platos son una mezcla de historia , tradición y vanguardia. A eso le sumamos la magia de los sabores bien combinados y el resultado de las manos de un buen chef como es Pepe y obtienes una velada única y recomendable .
Espectacular.... Cocina de categoría y trato exquisito. Menú 25€ muy merecidos.
Un sitio muy recomendable, la atención espectacular y la comida no se puede mejorar, recomiendo las alcachofas y el pato. Volveré a Ocaña, solo por tener el placer de volver a comer aquí.
No conocíamos el lugar, nos encantó, por su ambiente diferente y singular. El dueño nos comentó la carta y los platos especiales, tomamos un pato a la naranja exquisito, las croquetas muy ricas y las alcachofas muy tiernas. Después nos hizo la ruta por las cuevas. Algo inesperado y muy especial. Una
Ayer repetía visita, estuve con un compañero en enero, era el cumpleaños de mi hija, y nos desplazamos desde Albacete, la comida riquísima, alcachofas, corvina y un plato de venado con frutos rojos soberbio. Pepe nos explico los platos y nos ayudó a elegir, un acierto por su parte (mi agradecimiento
Una experiencia maravillosa, la comida exquisita, el trato del servicio incluso de su chef Pepe que está pendiente en todo momento, y también añadir la música en directo de una chica tocando en violín excepcional, repetiremos sin duda.
Muy buen sitio para comer La carne tierna, blandita y en su punto El pato recomendable 100% Los patés deliciosos La oreja rebozada muy blandita
Una atención increible por parte del dueño y la camarera. La presentación de los platos es maravillosa y pudimos cenar muy bien. Todo muy rico.
Sitio más que recomendable e imprescindible si vas a Ocaña. Desde el servicio, el ambiente y la comida son espectaculares. Las camareras en todo momento pendientes, muy agradables y te dan recomendaciones muy acertadas. Luego Pepe, el dueño del restaurante y chef se pasa por las mesas para enseñarte
La comida excelente. Buen producto y mejor elaboración. El trato de todos los empleados excelente. El dueño se preocupa por ver que tal todo y en ayudarte o recomendarte. Como extra una visita a las cuevas que merece mucho la pena con una pinceladas de historia muy interesantes.
Sitio muy agradable, con muy bonita decoración. Pepe te explica cada plato con entusiasmo y luego te enseña las cuevas con pasión. Por las noches ameniza una violinista.
Excelente. Hemos comido y degustado en un buen ambiente. El chef nos ha aconsejado los platos. Magnífico
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