Alma Napoletana

Ha cambiado su nombre y ahora se llama Terra Nostra; lo que no ha cambiado, vistos los comentarios, es la calidad, que sigue siendo excelente. Ubicada en un sitio ideal, una zona peatonal, con una amplia terraza, es perfecta para disfrutar de una comida tranquila. Su carta, la típica de los restaurantes italianos: entrantes, ensaladas, gran variedad de pastas y pizzas y algo de carne y pescado, no faltando los postres caseros. Tenía ganas de pasta y pedí spaghetti allo scoglio, que lleva gambas, calamares, almejas, mejillones, ajo, aceite y perejil. Tardaron unos 20 minutos en llegar, dándome la impresión de que la pasta estaba recién cocida y de que ese era el tiempo estrictamente necesario para preparar el plato. Estaba excelente, la pasta suelta, abundante y con el punto perfecto, y el resto de ingredientes igual. Con ese único plato ya me quedé harto, pero no pude resistir la tentación y pedí un tiramisú casero, que estaba buenísimo. De bebida pedí una jarra de cerveza de medio litro. En total, una cuenta de 18,50 €. La atención, a la altura de la comida, amable y simpática. Tuvieron el detalle de ponerme unas aceitunas de aperitivo y un chupito de limoncello.