Verbena Cocina De Temporada

Es un sitio que me recomendaron y, por supuesto tenía que ir a conocerlo. Soy amante del vermut y de las tapitas que lo acompañan. Vine aquí porque me hablaron de lo rico que estaba su vermut y sus tostas, la de sardina buenísima, por cierto. Tiene una carta muy rica. Nosotros para dos pedimos dos tostas de sardina y tomate, la mía con pan sin gluten. Además, nos ofrecieron fuera de carta sepia en su tinta con habas baby (riquísimo). También pedimos el tartar de lubina y el pulpo. Estaba todo delicioso, todo. La única pega que les pongo, y el motivo de que no le de cinco estrellas, es porque la cantidad de los platos me parece muy escasa. La tosta de sardina venía con media sardina “literalmente”; el pulpo venía ya cortado y me apuesto un brazo a que no era ni una pata; y, el tartar de lubina lo acabamos con 4 cucharadas. Nosotros no somos muy comientes, pero hay veces que ni tanto ni tan poco. Aún así, nos encantó todo!

Sé por experiencia que uno no ha de construir expectativas antes de acudir a un restaurante pues corre el riesgo de decepcionarse. En este caso fue absolutamente al contrario: acudí al local con las expectativas muy altas; las superó todas, dejándome con un agradable gusto en boca a café, cacao y licor de almendras. Fui junto a otros tres amigos un sábado, cenamos en la sala, un sitio muy acogedor. La terraza estaba llena del todo, tenían mucho trabajo, pero no por ello perdieron calidad, ni la comida, ni el servicio. Todo fue increíble: no tengo palabras para expresar la sorpresa que me llevé con la comida, toda de calidad excepcional, cada plato pensado, elaborado y servido con mimo y cuidado al detalle. Quisiera resaltar como mis platos favoritos el Carpaccio de Angus, el Tartar de Lubina, el espectacular Pulpo Verbenero, siendo uno de los pulpos más tiernos y sabrosos que he probado, y el Tiramisú Di Saronno, que te transporta a Italia de un bocado. A destacar, la gran variedad en su bodega, ofreciendo muy buenos vinos, tanto en copa, como en botella. Y, como camarero que soy, no quiero acabar sin reseñar el formidable servicio de esos hábiles camareros que nos atendieron, que, aunque tenían mucho trabajo, no escatimaban en atención al cliente, ni atención al detalle. Rápidos como pocos he visto, grandes profesionales del gremio. Sin duda volveré cuando visite Murcia de nuevo.

Bar restauran bastante recomendable a 5 minutos de la catedral de Murcia,vi las reseñas en google y probamos,y salimos muy contentos de la comida y la bebida,sitio ideal ya sea para picotear o para comer, en nuestro caso preguntamos a la camarera por que nos aconsejaba, de 1o si no recuerdo mal era ventresca de caballa, todo venia acompañado por una camada de verdura tipo juliana cortada con mucho cariño,calabacin,pimiento amarillo...(que le daba un sabor muy dulce)y con una especie de vinagreta de modena, luego probamos un buñuelo de bacalao,muy rico, el pescado se notaba era de 1a calidad y del dia,bien fresco,todo regado con cerveza de Jaén,"el alcazar"6%°de alcohol, fuerte pero suave a la par.Ademas tiene Cerveza de barril,Amstel y cerveza El aguila. Disfrutamos de este picoteo en las barras que dan a una calle bastante comoda y con buena sombra. Baños unisex y local limpio.Cuando estemos de vuelta por Murcia volveremos a probar mas cositas de este buen local.

Comida para 2 en la barra. El sitio es muy original por dentro, bien decorado y es agradable estar sentado en la barra viendo la vitrina con el producto fresco, los vinos y la cocina. Alberto y su equipo son muy simpáticos y nos aconsejaron muy bien lo que pedir. El tiramisú espectacular! Volveremos para seguir probando lo que se les vaya ocurriendo... Creatividad a tope!