El Togo

Bar céntrico, en la zona universitaria. Era la primera vez que visitaba Murcia y nos recomendaron el Togo como uno de los mejores bares para comer de tapas. Todos los camareros son super amables, pendientes en todo momento de nosotros y aconsejándonos sobre qué tapas elegir.Todas estaban deliciosas, hechas con mucho amor. Aún ya sin hambre, no podíamos dejar de seguir deleitándonos con otra degustación...una experiencia de 10 y 100% recomendable.

Mítico bar en el centro de Murcia donde no fallarás. Gran variedad de tapas, cerveza y vinos. Servicio rápido, atento, simpáticos y educados. A hora punta está siempre lleno, hay mesas dentro y fuera una pequeña terraza. Aparcar es difícil pero hay parking de pago muy cercanos. Lugar de referencia cuando estás en Murcia y te apetece tomar algo.

¡Una experiencia extraordinaria! Este bar superó todas nuestras expectativas. Los crepes de ternera y boletus son una delicia que no te puedes perder. El tartar de atún rojo, buenísimo, con unos toques cítricos que acentuaban todo el conjunto. El servicio, simplemente espectacular, nos hicieron sentir como en casa, viniendo desde Algeciras. Lo más destacable es cómo trataron a nuestro perro; le proporcionaron agua con hielo, ¡incluso un poco de jamón! Fue un gesto encantador que realmente apreciamos. Este lugar es un verdadero tesoro, ¡definitivamente merece cinco estrellas! ⭐⭐⭐⭐⭐

Fue nuestra primera vez en Murcia y nos lo recomendó nuestro guía del free tour. Merece la pena ir, es un lugar que se llena mucho, nosotros estuvimos en la barra, si bien es cierto hay muy ruido pero te la pasas bien. El baño estaba limpio, y las tapas muy buenas. Probamos la famosa marinera, que nos sorprendió mucho el sabor que le da la anchoa, y otra de las cosas que en particular me encantó fue el postre de la abuela (creo recordar que así se llamaba) una delicia me recordó cuando era pequeña. Nos encanta probar las cervezas con limón, y la Verna está deliciosa. Si volvemos a Murcia, será una de nuestras paradas

Fuimos ayer noche por primera vez y nos sorprendió para bien. Hicimos tiempo en la barra para poder sentarnos dentro (hace un calor insoportable en la calle). Como tardaron más de lo que nos dijeron, nos invitaron a un entrante. El resto del servicio rápido y muy amables. Las bravas estaban buenas aunque no picaba nada la salsa. Caballito y marinera normal, nada especial. Lo mejor, los crepes de boletus y chato murciano, sabores muy diferentes y muy sabrosos. Y la brocheta de chato súper sabroso y jugoso. Muy recomendado!! No pedimos postre pero los vimos y tenían buena pinta.