Sara Herrera (RedSonja)
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Veníamos del Vostell con más hambre que los pavos de Manolo y con el día tan feo que hacía no teníamos mucha fe en encontrar sitio pa llenar el buche, peeero, aquí nos estaba esperando este buen sitio. Reservamos por si acaso y nada más llegar en pocos minutos nos tenían ya la mesita lista.
De su carta variada al final nos decantamos por puntas de solomillo (la carne jugosa y de calidad rodeada de papitas), una ensalada templada de canónigos con piña, aguacate, alcaparras, tomate...una delicia!
Y pa coronarnos, dos de sus postrecitos, un suculento coulant de chocolate y la tarta de queso la mar de riconuda.
Un ambiente tranquilo, limpio y un personal atento y amable.
Volveremos porque yo tengo que seguir probando esa carta!
J0R0bat3, Flanders!
Hemos estado hoy cuatro personas y todo genial,la comida muy buena y de buena calidad,quizás un pelín escaso el plato pero bien,de seguro repetiremos,y el trato camarero cliente un 10,seguid así chicos.
Hemos pedido unas raciones y nos ha gustado mucho, el servicio bueno y el precio normal
Se está muy a gusto, la comida está súper buena y atienden muy bien! Siempre que podemos ir a cenar al pueblo ni pensamos,vamos allí directamente.
Muy agradables y la comida muy rica. Pedimos la ensalada templada, las puntillas de solomillo y las puntillitas y nos encantó todo. Cuando pasemos por Cáceres volveremos aquí.
De los mejores restaurantes que puedes visitar en este pueblo. Comida típica, trato excelente y rápido.
Precio acordé con la calidad y cantidad en sus platos. Buena terraza y camareros atentos. Acertaron con las recomendaciones. Las puntas de solomillo espectaculares. MUY RECOMENDABLE. Volveré.
Buen sitio. Te atiende un señor muy atento, buenos desayunos, se come bien, la terraza es amplia y cómoda y está muy bien situada, justo a la salida hacia los barruecos. Merece la pena acercarse desde Cáceres para pasar un rato agradable para desayunar, comer, cenar, o tomar algo. Recomendable.
Calidad-precio inmejorable. Nos dejamos recomendar por el camarero y acertó en todo. Las puntas de solomillo, increibles. Vinimos de paso pero sin duda, es un sitio para repetir por el trato y por lo bien que comimos
Comimos allí el viernes Santo, estaban completamente desbordados pero intentando empatizar con los camareros, me levante en varias ocasiones a la barra a pedir, solo recibí sonrisas y gratitud por su parte.Comida muy agradable en familia.
Muchas gracias
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