El zumo de naranja más rico que he probado en Madrid! No tengo idea cómo lo hacen, pero es delicioso! Y el sándwich es simple y exquisito! Definitivamente amé este pequeño y cálido lugar. 🫶🏻🤤
El pan es DELICIOSO. Hace que las tostadas con tomate y los montaditos merezcan la pena. La camarera es un amor.
Sitio genial donde vamos a desayunar. Buena atención, buen cafe y comida
El mejor café del barrio con muchísima diferencia, redescubrí este sitio por casualidad, y ya me he vuelto asiduo por su rico café. Enhorabuena y larga vida.
Buen servicio y una gran calidad. El trato, siempre que he tenido oportunidad de ir, es cálido y sientes que eres una parte más de Italia mientras disfrutas de tu comida.
Lo que más me gusta son los cafés; es de los pocos sitios que conozco que hagan un Arte Latte tan bueno. Buen sabor, buena presen
Trato super amable y unos bizcochos increíblemente buenos.
El café, excelente.
Deslumbrante por dentro. Atención inmejorable y un café estupendo. Un poco de Italia en Madrid.
Sitio agradable, tranquillo e impecable. El café está riquísimo y siempre tienen bizcochos caseros para acompañarlo. Si vas a primera hora está muy tranquilo y hasta puedes disfrutar con buena música mientras desayunas. Sí vas a media mañana tienen un bocadillo de tortilla de patata ex-pec-ta-cu-lar
Considero que cuando voy a comer valoro la calidad del producto que recibo, la atención y el servicio así como la limpieza.
Es un bar muy agradable que invita a desconectar y disfrutar de un buen desayuno ,su café italiano increíble, su bizcocho es casero y si vas con hambre alguna vez he probado su
Qué buen lugar para disfrutar de un italiano en época de frío. Tiene buen menú, no muy variado pero cambia durante la semana, aún así los platos son ricos y abundantes (incluyendo medio menú diario). Mi favorita pasta corta con boloñesa 🔥
Cafetería con comida casera increíble. Sólo se come de menú, muy económico y variado con bastante influencia italiana. El personal encantador y los postres... lo mejor! Aunque si te gusta el café, su capuchino hecho con leche fresca es de lo mejor de Madrid.
Práctico y acogedor. La pasta está buena y con el menú completo te quedas bien, sin hambre, pero no llena de no poder más.
Un sitio regentado por italianos donde la pasta sabe a pasta. Raciones generosas y deliciosas; además, el trato es estupendo, sobre todo la camarera es un amor. Uno de mis rincones favoritos de Madrid sin duda
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