Sin duda uno de esos pequeños rincones de lavapies poco conocidos pero con un encanto increíble, tanto por la buena atención de los dueños como por el sabor de todos sus platos. Sin duda comida muy autentica, a un precio más que asequible. Sin duda uno de mis favoritos
Buena comida marroquí sencilla a un precio muy razonable. El servicio es muy amable y simpático. La estancia es muy pequeña pero se está lo suficientemente cómodo. Cuando fuimos no había mucha gente por lo que esto no fue un problema.
Comida exquisita, abundante y a muy buen precio. El trato con el propietario muy bueno y atento.
Un sitio para descubrir y apuntar en tu agenda.
Los lunes está cerrado y el pago tiene que ser en efectivo. Es la única pega que se podría poner.
La comida es estupenda, y el precio no es nada caro (dos personas, 26 con entrante dos platos y postre). El dueño es un encanto y sirven jarra de agua, directo a la lista de favoritos y volveremos pronto, gracias!
La comida es excelente, los sabores son muy fieles y el pan es casero.
La atención es muy buena también.
Restaurante familiar, con muy buena atención, amabilísimos. Los platos excelentes. Repetiremos sin duda
Un pequeño restaurante árabe muy agradable. La comida realmente exquisita. Muy bien atendido. El chico que lo lleva es encantador. y para redondearlo todo unos precios de lo más razonable. Fuimos tres, pedimos cada uno un plato principal y un postre y pagamos 10 € por cabeza.
Es un auténtico placer manducar en esta casa .
El servicio es excelente, un lugar tranquilo en una calle poco transitada, cocina muy cuidada y artesanal, incluso hacen el pan aquí mismo.
Sin parafernalias ni adornos.
Un lugar sencillo y limpio.
Todo lo que he probado me ha deleitado Recomiendo calma
Comida tradicional marroquí. Deliciosa, accesible y preparada con mucho cariño. El servicio es inmejorable. El espacio es pulcro, silencioso y familiar. Probamos el cuscús de pollo con verduras y ciruelas, acompañado de una crema de habas (Byessar). Servido con el clásico pan árabe. De 10. Volveremo
Comida buenísima, casera y auténtica a un precio muy accesible (por 8 euros puedes hincharte con un buen plato de cuscús o tajin). Sitio limpio y acogedor. El dueño es muy agradable y sociable. Totalmente recomendable incluso para ir todos los días, ya que el precio te lo permite
Muy buen sitio - volveremos muchas veces! Excelente comida (empezando por el pan), muy buena atención y buenos precios. Y si no vives por el barrio (como nosotros) ... es genial, vas antes a la vieja fábrica de la Tabacalera y depués una buena comida en el Ikram ...
Un lugar fantástico, al entrar en el local te transmite una sensación de paz y tranquilidad, como al llegar a casa. El ambiente es muy familiar y acogedor. La comida increíblemente rica y sabrosa. También hacen desayunos riquísimos! Totalmente recomendable! Volveremos!
Acojonante lugar. Comida marroquí casera hecha en el día, buenísimo lo que probé, sobretodo el cous cous con pollo, y lo mejor, una comida que hasta el pastel árabe entra solo y es puro hojaldre. Todo muy suave sin estar muy especiada, la esencia de la comida marroquí en Lavapiés y con ese carisma q
Mi restaurante Marroquí favorito de Madrid. Comida riquísima a un precio inigualable. Cocinado por una señora marroquí que deja su toque en los platos. El cuscús esta de muerte!! Té moruno del bueno, pan orneado por ellos, pastelitos, etc, todo muy bueno. Un lugar familiar, con un dueño muy simpátic
TE SIRVEN UNA JARRA DE AGUA SIN NI SIQUIERA PEDIRLA. Mírame a los ojos y dime cuantos lugares conoces en los que hagan esto...
Increíble restaurante de cocina marroquí al lado del centro de Madrid. Al entrar, no eres consciente ante la tranquila decoración y atmósfera de que estas a punto de comer e
Deliciosa comida y una buenísima atención, cercana amable. Pedimos cous cous y estaba buenísimo, pinchos de carne picada y un entrante de habas. Salimos a 10€ por persona comiendo muy bien y con café. Para volver.
Comida marroquí auténtica, casera y verdaderamente exquisita. No te pierdas el pan que hacen ellos mismos y la baisara de habas, que es deliciosa. El dueño es supersimpático. Los precios muy ajustados.
Volvería sin dudarlo!!!
La comida– increíble, me encanta sus platos de pinchos, cuscus, y tajin! Pero lo mejor es el servicio– Mohammad siempre está sonriendo y cantando, Malika también siempre está feliz y puedes saborear su alegría en la comida que ella cocina! La restaurante tiene un gran ambiente y me encanta comer y p
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