Belbo Piropo

Un restaurante muy bonito con muy buena ubicación en Santa Ana, los detalles marcan la diferencia algunas veces y esta es una de ellas sin duda. Me tome una coca cola por que estaba de paso pero le eche un vistazo a la carta y la comida que estaban sacando tenía muy buenta pinta, sin duda volvere a probar alguno de sus arrozes. El camarero, Pablo, muy amable y atento a pesar de estar solo.

Una vez más un acierto. Es la tercera vez que voy y voy a volver sin ninguna duda. La atención del personal fue espectacular, atentas en todo momento a nuestras necesidades. En cuanto a la comida, se ve nota la calidad de los productos y que la cocida es exquisita, el resultado es buenísimo. Lo he recomendado a mis conocidos y voy a seguir haciéndolo, es un sitio donde ir es acertar con la elección.

Un local precioso, con una muy buena atención. Estuvimos en el interior relajados y pudiendo conversar. Un acierto total visitarlos. Tienen una gran variedad de arroces, y el que comimos estaba riquísimo. Y unos entrantes estupendos pero seguramente lo mejor sea el pescado. Unas tapas y platos bastante completos y jugosos. Recomendable 100 × 100

Es la tercera vez que vamos y estamos encantados con el sitio, tienen una cocina mediterránea de mucha calidad además el personal que tienen es encantador. Las dos ultimas veces nos atendió Ana y le pedimos recomendación para una botella de vino y he de decir que acertó con creces. Para comenzar pedimos unas croquetas de puchero que estaban muy jugosas y unos brioche de gambas con mayonesa picante (he de decir que pica lo justo para no matar los sabores) y otro brioche de solomillo. Después pedimos unos espetos que estaban en su punto muy recomendables y para terminar la chuleta de vaca gallega viene acompañada con unos pimientos de Padrón y unas patatas fritas. Lo que más nos gustó fue la carne en la pedimos al punto y se le notaba que era de gran calidad por el sabor que tenía. De postre te traen todos y puedes elegir el que más te guste nosotros siempre nos decantamos por la tarta de queso ya que somos unos fans de ella. Sin ninguna duda un gran sitio para comer o simplemente tomarte unas compás en un lugar muy céntrico de madrid.

He de decir que la primera impresión no fue la mejor y cuando pedí no había justo dos de las cosas que queríamos. Pero esa mala impresión cambió en un momento. Nos atendieron espectacularmente, con mucho arte y salero. Excepto el brioche de gamba que no le encontré sabor especial, lo demás estaba bien. La sorpresa son los postres….que no vienen en la carta… Asi que la próxima vez volveré a por los platos que no había…y a por una paella que estaban inventando…saludos

El local por dentro es muy bonito, todo nuevo y con excelente decoración. La terraza esta muy bien también, en un entorno ideal en el centro de Madrid. Cenamos un numeroso grupo compartiendo: Croquetas de puchero- estupendas, cremosas y con mucho sabor, rebozado fino y crujiente. Sardinas en espeto- eran más parruchas q sardinas, para estar en temporada podían haber sido más gorditas. Bienmesabe- muy rico y muy escaso, mucha patata, que no aporta nada y poco pescado, deberían revisarlo. Boquerones- a mi me gustaron aunque hay a quien no ... discretamente macerado y casi crudos, está textura tuvo sus críticas, no fue mi caso. Arroz negro y arroz señoret- pues francamente bien, sobretodo si consideramos el lugar súper turístico del enclave. Si los guiris comen este arroz se pueden llevar buena impresión y no de los arroces cutres que abundan en otros sitios para turistas. No es q sean unos arroces excepcionales pero insisto q para el entorno son muuuuy aceptables. Es un sitio para repetir y a destacar el buen servicio y la atención del personal.