Nômâda

Me ha gustado mucho Nómada. El lugar está muy bien ubicado, el local y su decoración ha cuidado todos los detalles necesarios para hacerte sentir en ambiente de una jaima en mitad de Madrid. Y a todo esto se puede añadir que la comida está muy bien, acompañada de unos cocktails muy bien elaborados y unos postres deliciosos. Tengo que hacer un enciso para el tiramisu, es definitivamente imperdible. Si llegas antes de las 21h, hay 2x1 en su oferta de bebidas. Hay un show de danza árabe muy curioso durante el servicio. Un par de puntos de mejora: algunos de los cocktails tienen una presentación muy chula en la carta (con vídeos) que no es real cuando te la sirven en el restaurante. Por momentos, tienes la sensación que te están metiendo prisa (yo entiendo el tema de los turnos pero a veces también creo que se podría gestionar de otra manera). De todas formas, volvería sin dudarlo porque lo pasé muy bien.

La definición de Nomada es FUERA DE LO CORRIENTE. Desde que entras la atención es impecable, te atienden con una sonrisa y te sientes como si fueras el único cliente porque el servicio es muy ágil (en pocos sitios he visto un servicio igual). Si hablamos de la carta, hay variedad de platos. Probamos el risotto, los tacos, croquetas, surtifo de hummus, tarta de queso con pistacho... sin exagerar todo estaba ESPECTACULAR. El ambiente acompañaba mucho a la cena, hubo espectaculo de bailaria exótica (nos encanto). El precio diría que se ajusta al servicio que dan (hemos ido a restaurantes que ni la comida ni el servicio valían nada y nos ha salido más caro). Lo recomiendo 100%, tenemos claro que vamos a volver.

Tenía ganas de cenar en este restaurante y la verdad que me lleve una grata sorpresa. El sitio es muy bonito y el ambiente, así como su música es genial. De entrante pedimos el surtido de humus que estaba muy bueno y llena bastante. Los finger de queso muy buenos y el halloumi, que aunque estaba bueno, el queso apenas tenia sabor. La croqueta de pollo sin más la verdad. El shawarna de pollo estaba bien. Los postres nos decantamos por la tarta de queso con pistacho que además de estar buena, la ración es muy generosa. Y la tarta selena que el sabor avainillado era muy suave y bueno. En términos generales nos gustó.