Horno Estrella Del Sur

Pastelería-cafetería junto a la estación de metro Arganzuela-Planetario. Tienen una gran variedad de bollería en el mostrador y bastante ajetreo de clientes a la hora a la que voy. Tienen una zona de mesas bajas, una barra junto al cristal de la fachada y una terraza para cuando hace buen tiempo. Pido un café con un donut de chocolate. El café está bueno y el donut aceptable aunque me lo esperaba mejor por la pinta. Precio 2,80 €.

Los dulces están buenos pero el local para tomar un café no está a la altura (limpieza, atención del personal). Hay que ser más amables con los clientes. Al dueño del establecimiento, si cierran a las 20 horas un domingo, no puede ser que a las 19,30 estén fregando. Cambie el horario o recoja más tarde.

El lugar suele estar abarrotado sobre todo en horas de entrada y salida de los colegios. El genero es de calidad y bastante bueno, tanto en cafetería como en bollería. Sin embargo, el horario marcado es hasta las 19,30 pero no puedes pedir un cafe a las 19,00 porque la maquina ya se ha limpiado. Esta claro que el personal esta explotado porque no están muy preocupados en servir a los clientes de una forma correcta.

Pastelería con apariencia de calidad pero realmente es mediocre. Los pasteles son simplemente "modernos" pero de sabor normalito tirando a malo. Una pena porque si la calidad fuese buena tendría éxito porque en el barrio no hay ninguna pastelería de calidad. Nunca veo demasiada gente. sólo a las horas de entrada y salida del cole.

Terrible atención. Llegué con un perro literalmente mini en brazos, y me dicen: los perros no pueden entrar aquí; a lo que respondí: sin problema, solo voy a pedir algo de bollería. Pregunté si las mesas de afuera eran del local, de mala gana me dijeron que sí. Entonces pedí un café para sentarme afuera; pues la misma “señorita” me vuelve a encarar diciendo que no puedo estar con mi perro, a lo cual respetuosamente le apunté: tranquila señorita, es para tomar en la mesa de afuera. Soy de las personas que dicen las cosas con respeto, no como en este lugar donde queda claro que la atención al cliente es sumamente deficiente y las damas que trabajan ahí creen que pueden desquitarse con uno solo porque están currando un domingo a las 5 de la tarde. De paso la napolitana estaba horrible, nada de sabor. Si pudiera pondría 0 estrellas, claramente no volveré a este lugar.

Hace tiempo tuve una experiencia un poco desagradable cuando tuve que volver a entrar poco después de haber comprado porque me habían cobrado demás, se puso una un poco borde. Y hoy ya ha sido la gota que colma el vaso, le han cobrado a mi pareja por un roscón tirando a pequeño, 22 eurazos! Ni en el barrio de Salamanca! Intentaré ir lo menos posible.