Jose Luis San Francisco De Sales

Siempre que quiero un pincho de tortilla voy a José Luis. Para mi juicio es el más rico o sino entre los 3 más ricos de Madrid. Además la variedad de pinchos en enorme, pinchos fríos y calientes, todos de una calidad sublime. El resto de la carta es muy buena, amplia y comida española tradicional pero de un gran sabor. Jose Luis es una de esas cadenas que no fallan nunca en la calidad. Tienen una gran repertorio de vinos, el ambiente es muy muy agradable y el personal (en este caso estuve en el de Francisco de Sales) es muy amable.

Restaurante elegante con una carta variada y un trato excepcional por parte de los camareros. La burrata muy rica, y las croquetas variadas muy ricas y cremosas. La tortilla de patata espectacular, un punto fantástico y con mucho sabor. De postre la tarta de queso muy buena, estilo tradicional. Recomendable sin duda.

La atención excelente. Nos atendió un camarero que era su primer día allí, el hombre controlaba mucho, ni se le sentía. Un trabajo de 10! Los asientos son súper cómodos, fresquito, todo al detalle. Están muy ricos los pinchos, la tortilla deliciosa, los callos, y la TARTA DE LIMÓN puedes comerte una porción entera tu solo o sea esta bestial. Ponerle alguna pega: la ensaladilla sosa, faltaba más sabor y mayonesa le quitaría por supuesto el pimiento rojo. La merluza del pincho estaba fría yo le hubiera dado un puntito de calor al pescado antes de ponerlo sobre el pan y la cerveza de grifo es Heineken, errooooor para mis gustos. Tienen benjamines de cava eso es TOP.

Hemos ido un grupo de amigos e íbamos con ciertas reticencias por algunas reseñas, pero hemos comido de fábula, todos los platos demandados estaban exquisitos. Ha sido una comida muy agradable en todos los sentidos. Yo conocía ya el situado en Serrano.....pero ha sido una grata experiencia, para repetir, sin duda

La tortilla de patatas exquisita, no liquida cómo se lleva ahora, pero muy jugosa y con un punto justo de sal. Me he quedado con ganas de probar la paloma, cómo llaman a éste pincho en algunas regiones, es una corteza de trigo con la ensaladilla rusa encima; tenía una pinta suculenta. Precios moderados en comparación a locales más de moda Lugar de toda la vida, con otros establecimientos en distintas áreas de Madrid. Ambiente tranquilo y sosegado. Han cubierto la zona de terraza y por la ubicación de noche se tiene que estar muy agradable. Y servicio muy atento y profesional sin atosigar.