La Veritá

Sitio agradable, con buena terraza y personal atento. Los helados excepto los de galleta son sin gluten. La pega es que las tarrinas tienen poco contenido, al tener el fondo más elevado de lo habitual y eliminando la posibilidad de que entren las dos bolas, ya que te lo sirven con paleta (lo que engaña a ala vista), menos producto, más dinero… Además por la tarde sólo puedes ir a tomar helados, pues no tienen cocina hasta las 20:00 y no puedes disfrutar de nada caliente, hasta entonces.

Estuvimos anoche cenando en la terraza, era la primera vez que íbamos y no será la última. Empezando por el trato del personal que te sirve, decir que son agradables es quedarse corto, sin duda da gusto ir a un sitio y que el trato del personal sea tan bueno. Por otro lado, la comida muy rica, pedimos la parmigiana de berenjenas y nos gustó mucho pero las flores de alcachofa sin duda fue lo que más nos gustó, si vais tenéis que probarlas! Y la focaccia riquísima también. La próxima vez que vayamos esperamos tener hueco y probar sus helados!

¡Muy recomendable! Pedimos una ensalada, un plato de pasta, una pizza y un trozo de tarta de queso para compartir entre 2 personas. Estaba todo delicioso, cantidades son perfectas y relación calidad-precio bastante razonable. Además, se está genial comiendo en la terraza cuando da el sol. Volveremos :)

Este italiano es bastante completo. Tienen heladería muy rica con gelatina italiano. Y tienen muy buenas pizzas a buen precio y en un sitio muy agradable. Está ubicado en el barrio de Legazpi a 5 minutos del metro y hacia el barrio de los metales. Muy recomendado para una cena de viernes o sábado. Muy cómodo para ir con niños, tienen terraza y un parque justo al lado. Las opciones vegetarianas son escasas pero apañable.

Empiezo por el trato, personal muy atento, prestan mucha atención a los detalles y que te encuentres a gusto. En lo referente a la comida, un acierto el tener la tabla de embutidos para 2, dado que nos gusta mucho pero no siempre podemos pedirla por la cantidad, lo Parpadelle de rabo de toro un espectáculo y para terminar unos helados caseros famosos en el barrio, merece la pena ir a conocerlo.