Casa Santona Avenida De Nazaret

Restaurante clásico que siempre cumple. Tienen variedad en la carta, y todo es un producto de calidad, aunque en las varias veces que he ido, no siempre el punto de la comida ha sido el mismo... También tienen tienda para que puedas comprar desde antxoas de Santoña a otros productos gourmet. En cuanto al precio, relación calidad precio es correcto (aunque como todo, segun lo que quieras comer puede subir más o menos la cuenta), pero tienen platos como por ejemplo la entraña muy asequible y que cumple de sobra, u otros como marisco que aunque si están algo subidos de precio, son de calidad. Los postres si creo que podrían ser mejorables relación calidad/precio. Un clásico por la zona que siempre cumple

Varios items a mencionar . Principalmente la profesional y dedicada atención de la señorita que nos tomó nuestros pedidos , si mal no recuerdo llamada Ivania. Consumimos todo aquello que con gran acierto nos recomendó . Espectacular steak tartar y sublime pez limón . Pasamos una noche gastronómica espectacular y fuimos atendidos por la mencionada señorita con excelencia . Volveremos sin dudarlo .

La verdad es que los boquerones tanto adobados como en vinagre están muy ricos. Pero lo de las anchoas es de otro nivel, carnosas, sin espinas, servidas a la perfección. Nos quedamos con las ganas del pulpo a la brasa, que se habían quedado ya sin existencias, y de probar los berberechos, pero es que también fuimos algo tarde, y cerraba la cocina. Aún siendo relativamente tarde, el trato de la camarera fue excelente, amable, rápido el servicio y del chico que nos trajo las viandas también, aconsejando nos qué cenar. Repetimos seguro.

Me recomendaron este restaurante y es la primera vez que iba. Sitio ideal para aperitivo y tapeo o comer sin prisas. Gran variedad de carta y todo riquisimo a un precio medio. El servicio super atento y rápido. Fui con amigos y pasamos una tarde super agradable porque no cierran y nos tomamos allí la copa y todo. Atmósfera con ambiente pero tranquila. Repetiré seguro! Gracias a los camareros por su estupenda atención.

Sitio de altibajos, está bien para desayunar, tomar un vino o una cerveza, con buen trato por los camareros especialmente por la mañana. Tiene variedad de tostas y platos variados, te ponen tapa con la bebida. Para comer es algo caro y no son muy ágiles, ten paciencia, la calidad es aceptable. Ambiente de todo tipo de edad.

Vinimos un domingo a mediodía (imprescindible reservar, estaba llenísimo) y todo me gustó bastante. Tomamos unas anchoas (las 0 porque no tenían 00) que estaban buenísimas, probamos los lomos de sardina en adobo, buena relación cantidad precio (6'50€) y de principales el atún balfego al carbón, viene con un tarrito con puré de patatas, riquísimo y muy bien de punto, y el steak tartar con tuétano al carbón que estaba correcto, quizá con un punto más de mostaza para mi gusto personal que no soy muy aficionado a ella. De postre tomamos la milhoja de crema. Éramos dos y nos gastamos 75€ con dos copas de vino, un refresco y una botella de agua. El servicio fue bueno, aunque conforme el comedor se llenó estaban un poco sobrepasados de trabajo y tenían que correr muchísimo para llegar a todo, no les habría venido mal tener más personal para poder dar un servicio más calmado. Es verdad lo que he leído en otras reseñas de que la acústica del local es regulera y una vez que se llenó era difícil conversar. Así que recomiendo ir temprano, antes de que se llene del todo (en nuestro caso además había varios platos que ya no tenían disponibilidad como el pulpo).

Tenía ganas de conocer esta casa y no me defraudó. El lugar perfecto para degustar unas buenas anchoas con una cerveza bien tirada. Las alcachofas están divinas, muy recomendables. Los postres están buenísimos. La calidad precio es muy buena. Las camareras muy amables y profesionales. Volveremos muy pronto.

Todo un descubrimiento. Estuvimos cenando y nos encantó. Las tapas que sirven para acompañar a las consumiciones son generosas, algo que siempre hay que agradecer porque no todos los bares mantienen esta costumbre. Además su carta es muy variada. Yo os recomendaría la pata de pulpo y la tabla de quesos. También por supuesto alguna de sus conservas. En definitiva, un restaurante muy recomendable para comer o cenar por el barrio