Con 2 Fogones

La verdad que el lugar es una sorpresa. Tiene una web muy buena con bastante información de menús, carta pero aún así llegas al sitio y es una sorpresa. Tiene una decoración llamativa pero bonita y acogedora, con un ambiente perfecto para relajarte y disfrutar del momento. La atención súper educada y todo muy limpio y cuidado en muchos detalles. La comida, al ir a cenar decidí no pedir cachopo ( su plato recomendado) pero hablan genial de los que tienen, aún así me pedí una hanburguesa. No me esperaba esa hamburguesa, dos trozos enormes de carne (carne carne no producto procesado) con su tomate natural, su ensalada (rucula) y unas patatas gajo con salsas para mojar. Ofrecen cerveza de elaboración artesanal buenísima. Totalmente recomendable.

Lo visité el mes pasado con un amigo hace dos semanas y muy rico todo. Pedimos el menú de 29€ que incluye entrante, principal, degustación de postres y 3 bebidas por persona. Las quesadillas de pulpo estaban riquísimas. Las croquetas y el brie también muy buenos. Pedí la carne y la entraña súper rica (había otro tipo de carne también pero estaba más seca y me gustó menos) el único fallo fueron las patatas gajo congeladas (sería más top con patatas caseras) De postre me gustaron el brownie y el tiramisú (la tarta de limón me pareció un poco empalagosa).

Fui con mi chica hace un par de semanas a comer el menú de cachopo que ofrecen durante julio y agosto y nos sorprendió gratamente. Ambos habíamos comido una única vez cachopo de ternera y nos había gustado mucho, por lo que íbamos con miedo a que no nos gustará, pero totalmente equivocados. Puedes elegir 2 entrantes, nosotros elegimos la ensalada y el risotto. Todo delicioso, la ensalada tenia su toque dulce con el helado de mango y el risotto en su punto y templadito. En cuanto al cachopo una porción muy buena, nosotros lo pedimos con vacon y queso vegano y estaba delicioso, el queso recién derretido que y el vacon en su punto. El menú no incluye postre, pero tienen bastante variedad en la carta, nosotros optamos por un mojito y estaba muy rico. Respecto al sitio, bien localizado, a dos callecitas del metro de plaza España y el sitio es acogedor y limpio. La atención genial, super pendiente el camarero de que estuviéramos cómodos y nos repusieron el pan dos veces sin cobrarlo. La jarra de agua tampoco la cobran. También vimos que tenían menú diario con opciones veggies, así que es un sitio ideal para comer baratito y bueno. Lo recomiendo 100%

Fui a comer un cachopo vegetariano (tb hay opción vegana) con el menú de verano especial cachopo que son 35€ y nos entraba 2 entrantes (pedimos Pad Thai y ensalada), una botella de sidra y un cachopo. El cachopo estaba relleno de queso Violife y pedimos el que llevaba encima queso de cabra con mermelada. Tienen sies tipos de cachopo (jamón vegano, bacon vegano, queso brie, setas...) acompañado con pimientos de padrón y con patatas fritas. Estaba bueno. Me parece un buen menú relación calidad/cantidad/precio. Cómo 'pero', el Pad Thai era más tallarines fritos chinos porque nos lo sirvieron con pimientos rojos y verdes fritos, aunque estaban bien de sabor. Ambiente agradable y bonita la decoración.

Restaurante moderno, con encanto y cocina creativa que ofrece muchas opciones vegetarianas y veganas en su carta y menú diario. Nosotras fuimos por las Jornadas del Cachopo Vegetariano que se celebran aquí por primera vez, es un menú para dos personas con dos entrantes a elegir, una botella de sidra y uno de sus cachopos con bacon y queso vegano. La experiencia nos ha encantado y hemos comido de maravilla. Esperamos que tenga mucho éxito porque lo merece, todo buenísimo y la atención muy cercana. ¡Volveremos!

Fui a este restaurante a comer con unos compañeros de trabajo y pedimos el menú del día. Ya de primeras la carta de presentación llama la atención, al igual que el ambiente del lugar, con muchos detalles. Cuando empiezas a leer el menú te das cuenta de que lo que te ofrecen no es lo típico que puedes encontrar en otros sitios. Tiene una comida fusión entre la cocina mediterránea y la asiática con un toque creativo. Yo me pedí una Causa Mad-Lim de primero y un Poké bowl de atún de segundo, de postre una tarta de zanahoria. El menú de cantidad está echo para quedarte bien, normal, lo mismo un poco justo si eres de buen comer y tienes que tirar de pan para saciarte. El sabor de la comida es un espectáculo, muy bueno, me encantó, se nota que hacen los platos cuidando el detalle. El servicio de los camareros es correcto. Lo único negativo que puedo decir es que nos encontramos un pelo en uno de los platos cuando ya estaba casi acabado, me gustaría que se cuidara eso, es muy desagradable. Pero lo dicho, a excepción de esto, lo recomiendo plenamente.